Se cumple un año de la entrada en vigor de la Ley de Vivienda. Recordarán que esta traía como pack indivisible el control de los precios del alquiler. De momento solo se aplica en casi un centenar y medio de localidades catalanas. No hace falta correr a buscar precios para mudarse a Cataluña, no se preocupen, porque esta medida estrella del Gobierno no está teniendo los maravillosos efectos previstos. Resulta que no son ni una ni dos las asociaciones inmobiliarias que cifran ya en torno al 30% la reducción de la oferta tras la implantación de la medida. Los precios, además, siguen subiendo en todo el país y el alquiler vacacional sigue pegando ‘bocados’ al tradicional. Lo que se dice un éxito, vaya.