Primer duelo y primera victoria. El Intasa San Sadurniño superó con nota su estreno en una Superliga 2 elegida “a dedo”, toda vez que los locales renunciaron a su ascenso por cuestiones económicas y para no hipotecar el futuro del club. 

Así, de nuevo en la categoría de plata, pero con el honor de oro, los de Parga abrieron fuego en la competición ante el recién ascendido Galdakao, un nuevo grupo en la categoría entrenado, casualmente, por el extécnico de la formación san sadurniñesa Hernán Pesci.  

Sin excesivas referencias de su rival, los locales no escatimaron en su puesta en escena y, una vez superados los nervios del debut, el equipo azulón se mostró “muy centrado” y sabiendo jugar con los condicionantes de este encuentro, como era la poca altura con la que contaba el pabellón Urreta y al que le tuvieron que coger la medida en saques y defensa. 

Los de Parga supieron manejar también a un grupo vasco que no pudo contar con todo su potencial, sufriendo varias bajas importantes por motivos burocráticos. A pesar de esto, el conjunto anfitrión arriesgó en su presentación en la categoría en la que no tenían nada que perder ante el vigente campeón de la competición regular. 

El grupo de Parga comenzó con un claro 15-25 en el marcador, apuntalando el triunfo con el 19-25 y el 21-25 de las dos siguientes mangas, sin peligrar en ningún momento el triunfo de los de San Sadurniño. “Es muy importante empezar puntuando”; señalaba el preparador en su regreso a casa, colocándose así líder del grupo A y antes de su esperado debut en el Municipal. “Afrontaremos así el duelo un poco más tranquilos, pero ante un Palencia muy complicado”; señala el preparador.