Al margen de lo estrictamente deportivo –que tampoco admite ninguna duda: es una de las jugadoras con más talento de la liga– es un orgullo que haya personas de otros lugares del mundo que sientan Ferrol como su casa. Es el caso de Jenna Allen –Indiana, 1997–, capitana, con Irene Garí, del Baxi. Tan fuerte es ese vínculo que en verano rechazó ofertas muy superiores de Liga Endesa y decidió quedarse aquí para completar su cuarta temporada y devolver a su equipo a la elite del baloncesto español. Y el objetivo, a falta de cinco jornadas para el final, está más cerca que nunca.
Antes de empezar, ¿está plenamente recuperada de la lesión en el tendón de Aquiles?
Sí, sí. Me siento muy bien, la verdad. El año pasado, cuando empezamos la pretemporada, tenía un poco de miedo, me encontraba menos fuerte, pero ahora no. Ahora no lo pienso. La única molestia es cuando cambia el tiempo.
¿Cómo fue el proceso de recuperación de una de las lesiones más graves que puede sufrir una deportista?
La rotura del tendón de Aquiles es uno de los traumas más complicados porque necesita mucho tiempo de recuperación, tienes que volver a aprender a caminar, a correr... Es como empezar a hacer todo desde cero. Fue duro físicamente, pero mucho más mentalmente. En ese primer momento fue un drama, pero después de la cirugía decidí quedarme aquí para recuperarme con mi familia, porque esta gente es mi familia. Yo lo siento así.
¿No pensó en recuperarse en Estados Unidos?
Sí, pensé en mis padres y en volver a casa para estar con ellos, pero entonces estaba el Covid y era muy difícil. Pero, sobre todo, yo estaba muy bien aquí, muy cómoda, con mi gente, confiaba mucho en Carlos y Carlota, de la clínica Brage, y yo quería volcarme con mi equipo y ganar la Liga Femenina 2.
¿Qué es lo que le engancha de Ferrol?
Para mí, lo más importante en mi vida es la gente, porque la gente es la que hace tu vida, la que te hace feliz. Claro que echo mucho de menos a mi familia, pero mis amigas, las compañeras, Lino, la gente del club... La gente aquí es muy buena y yo quiero esas cosas en mi vida.
¿Cómo fue el cambio de Estados Unidos a España?
Cuando vine por primera vez tenía mucho miedo porque nunca había venido antes. No sabía nada del idioma, de la vida aquí, de sistemas... Nada. Y ahora es mi casa.
En verano tuvo ofertas para seguir en Liga Endesa cobrando bastante más de lo que cobra aquí. ¿Qué valoró para tomar la decisión de quedarse?
Cuando acabó la temporada hablé con Lino, que es muy buen amigo, y dije: ¡Vamos! Ferrol necesita estar en Liga Endesa. Es mi club y quiero que mi club esté ahí.
El objetivo está ahora un poco más cerca después de una temporada con momentos muy buenos y también con unas semanas de dudas tras las derrotas en Zamora y Alcobendas. Decía el otro día Jessica Féquière que el papel que jugaron las capitanas fue fundamental para mantener el grupo unido. ¿Qué pasó?
Bien, Lino siempre habla de humildad y trabajo. Esto es el Baxi y cuando llegaron los momentos duros es cuando nosotras más trabajamos. Hay muchas cosas que pueden afectarte, pero siempre tienes que centrarte en el grupo, en lo tuyo, y el trabajo es lo único que puedes controlar tú misma. Humildad y trabajo es lo que intentamos poner en práctica siempre, en cada entrenamiento y en cada partido.
¿Se habla en el vestuario de la cercanía del ascenso?
Nosotras hablamos, sí, creo que es normal hacerlo, pero ahora solo pensamos en el día a día, en el trabajo diario y en el próximo partido, que es Lima-Horta. No pensamos más allá, ni en Ardoi ni en Canoe, porque no es lo importante: lo importante es centrarnos en nosotras, nada más.
¿Qué importancia tiene el grupo a nivel humano para que eso tenga su reflejo en la cancha?
Yo quiero a todas mis compañeras, es decir, cada una de nosotras aporta al equipo algo que necesita. Todas somos y nos sentimos importantes, igual que Lino, Joan y Manu. Y en actitud la temporada está yendo muy bien: todas queremos trabajar y todas queremos jugar para el equipo.
¿Cuál es la importancia de Lino López en todo esto?
Yo respeto mucho a Lino. Él jugó muchos años y lleva muchos años entrenando también. Sabe mucho y es muy listo, y yo lo respeto mucho, como también lo respetan el club, la ciudad y la afición. Creo que él es el Baxi Ferrol.
La afición tiene ganas de celebrar un nuevo ascenso. ¿Qué va a hacer después?
De verdad que yo no pienso en eso porque lo que quiero es disfrutar del momento, disfrutar del día a día con mi equipo, con mi gente, con mis amigas... En eso pienso solamente.