El Racing de Ferrol, al que una victoria le habría permitido dormir como líder de LaLiga Hypermotion, no pasó este sábado del empate sin goles ante el Espanyol en el estreno liguero de 2024, un partido en el que el equipo catalán, incapaz de tumbar al cuadro local, dispuso de la oportunidad más clara para marcar.

Con Jon García como baluarte en defensa, los ferrolanos sacaron adelante el primer tramo pese a acometidas como la de Braithwaite, aunque fue con un disparo desde lejos, a cargo de Puado, cuando llegó, en el minuto 17, el primer susto.

Las fuerzas se igualaron en el ecuador del primer período y el Racing de Ferrol empezó a tener más dificultades para aproximarse a portería, con Puado de nuevo como protagonista de una de las acciones más peligrosas, pero no logró interceptar un balón enviado a la meta defendida por Ander Cantero.

La velocidad en el disparo de Heber Pena exigió a la defensa de los catalanes, que perdonaron un tanto cantado en el 34, cuando Pere Milla quedó a solas ante Cantero y estrelló el balón contra el poste.

Fue la oportunidad principal de los primeros 45 minutos, en cuya recta final los barceloneses ofrecieron un mejor rendimiento, gracias a su superioridad en la posesión, y apelaron a recursos como el balón parado, hasta con seis saques de esquina, aunque sin éxito.

El Espanyol entró con más aplomo al segundo período y consiguió adaptar el encuentro a sus necesidades, lo que llevó a Parralo a provocar los primeros cambios, que afectaron tanto al centro del campo como a una de sus bandas, con la salida de Vadillo, referencia atacante al arranque, pero las ocasiones siguieron siendo escasas.

Iker Losada se convirtió en estandarte de la acción ofensiva de los verdes, serios con Bernal en el centro del campo, y complicó el trabajo a jugadores como Puado, pero también desde la defensa, con Jon García, pudo subir el 1-0 al marcador en el 67 gracias a un cabezazo tras un córner.

Los cambios fueron menos efectivos en el bando visitante, que se fue apagando, mientras que el Racing de Ferrol insistió con una línea delantera renovada y retuvo la ventaja sobre el campo, aunque no pudo deshacer la igualdad en el primer partido del año en su feudo.