El momento más dulce del Racing esta temporada –ocho jornadas sin perder, 20 puntos de los últimos 24– no confunde al vestuario, que, pese a estar en puestos de playoff, insiste en la misma idea: todavía no se ha conseguido nada. Con todo, como reconocía ayer el portero naronés Diego Rivas, “las victorias ayudan a que la dinámica del equipo sea más fácil”, aunque reitera que hay que huir de triunfalismos. “Hay ilusión, sí, pero con precaución, porque queda mucho trabajo por delante y muchos puntos por sumar para alcanzar el objetivo”, indicó antes de resumirlo: “Esa ilusión no nos puede desviar del objetivo que tenemos por delante, que sigue siendo muy complicado”.
El meta suplente de la escuadra ferrolana afirma que para poder acabar la temporada entre los cinco primeros va a ser fundamental “la ayuda de la afición; queremos que la ilusión que sentimos aquí dentro le llegue a ella. Sabemos que ese aliento se traduce también en puntos”, añade.
Hace ocho jornadas, la situación del Racing era muy diferente de la actual. Estaba a dos victorias de la quinta plaza y acumulaba varias jornadas sin ganar –desde el último choque del 2021–, pero tanto la receta –el trabajo– como el discurso –la tranquilidad– eran exactamente los mismos. “Temos unha plantilla moi competitiva e adestramos ben”, apunta como claves de que el nivel general del grupo sea tan alto que el once no se resiente con ningún cambio. “Eu creo moito no traballo do día a día e que ao final os froitos están aí. Cando un equipo traballa todos os días de forma comprometida, independentemente do que xogue, ao final a xente que está xogando menos e que está traballando moito para que o equipo siga rendindo hai que darlle un valor. Esa é a clave de que un equipo como o noso poda acadar os obxectivos”.
Además de la racha, que es lo que cuenta a nivel clasificatorio, están las sensaciones que transmite el equipo, señala Rivas. “Independentemente de ter máis ou menos balón, vexo un equipo sólido, ao que lle fan moi poucas ocasións, aínda que sufra nalgún momento. Ao rival cústalle moito xerar”, explica. Tampoco hay en la plantilla obsesión por la derrota. Llegará, pues es lo normal, pero el portero cree que “debemos darlle menos importancia ao resultado que ao proceso, a como facemos as cousas. Centrámonos no que depende de nós para poder gañar cantos máis partidos mellor”.
Prolongar la racha positiva es el objetivo del domingo ante el San Sebastián de los Reyes, uno de los cinco partidos que le quedan al Racing como anfitrión. Una victoria reforzaría su candidatura al ascenso.