La segunda fase de Primera Autonómica tendría que haberse puesto en marcha para el Rugby Ferrol el pasado sábado en el terreno juego de A Malata. Sin embargo, las numerosas ausencias con las que contaba su rival en este debut –el Lalín– impidieron que se disputase este choque inaugural en el campo ferrolano. Una situación por la que los de Mauro Álvarez tendrán que esperar unos días más para resolver qué lugar ocupan finalmente en la tabla, en un ejercicio de transición para la entidad ajedrezada.
Una suspensión –que da a lo ferrolanos la victoria por 21-0– que prolonga un parón que para los locales comenzó el pasado 21 de enero, mientras que sus rivales en este grupo por la permanencia –Lalín y Pontevedra– ya jugaron el anterior fin de semana, con resultado de empate. “Teníamos todos muchas ganas de jugar”, señala Álvarez, en relación al duelo suspendido, “estábamos en alza hasta diciembre y el parón festivo y ahora este corta ese ritmo”.
Y es que la formación ferrolana había sumado, precisamente, sus dos triunfos de la fase regular en ese último mes del año –ante lalinenses y pontevedreses–, además de rozarlo en su choque ante el CRAT herculino previamente a finales de noviembre. “Ahora somos un equipo más completo, más rodado”, apunta el entrenador argentino, en referencia a un conjunto ajedrezado que inició de una manera mucho más irregular la competición y que, paso a paso, fue asentando su plaza en la máxima categoría autonómica.
Y es que la presencia de su formación en el cuadro por la permanencia –el último clasificado disputará una eliminatoria con el subcampeón de Segunda–, no inquieta en absoluto a Álvarez, ya que “ni siquiera especulamos con jugar por la permanencia... ni tampoco con estar arriba”. Y ello debido a que, como vienen señalando desde el club desde el inicio de esta campaña, “es un año complicado, un ejercicio para construir, con gente muy joven y que necesita más experiencia”, comenta, “y ahora ellos mismos ven que pueden tener una muy buena versión y tener continuidad con trabajo”..
Además del esperado inicio de la segunda fase este fin de semana ante el Pontevedra, el club de A Malata recibió una excelente noticia en la jornada de ayer, la asignación de una nueva fecha para su concentración de escuelas, a dirimirse finalmente el sábado 25 de marzo.
Y es que cabe recordar que este multitudinario evento, que iba a reunir en A Malata a más de 400 niñas y niños procedentes de toda Galicia, tuvo que suspenderse por las pésimas condiciones del campo de A Malata, debido a una denunciada falta de mantenimiento que convierte en impracticable este terreno, especialmente con adversas condiciones meteorológicas.