Hace poco menos de un año, el local Sergi Navarro Losada –Natación Ferrol– ponía sobre la mesa su intención de lograr su billete para el Campeonato de Europa júnior, y lo hacía poco antes de acudir a su segunda concentración con la selección y de lograr su lugar para el Festival Olímpico de la Juventud. 

Con su máxima de “trabajo y humildad” –si bien también “tienes que creerte que lo puedes conseguir. Tener objetivos e intentar obtenerlos. Todo con los pies en el suelo”, matiza Navarro–, el del Natación Ferrol salió de la piscina de Can Llong de Sabadell como campeón de España júnior de 200 espalda –quinto en la tabla conjunta absoluta– y mínima para una cita continental que se disputa en julio en Vilna, en Lituania. Con un tiempo de 2:03.57 –y batiendo asimismo una mejor marca gallega de su edad que ya había fulminado en las clasificatorias–, Navarro se mostraba “muy contento y satisfecho por todo el trabajo hecho”, tras unos meses de intensos entrenamientos y con esta mínima en el punto de mira. 

“Desde el principio de temporada conocíamos la marca y era el objetivo principal”, cuenta el ferrolano, “después de entrenar bastante estaba muy cerca de los tiempos, pero no sabía al cien por cien si la podía hacer, estaba al límite”. Una barrera que el del Natación Ferrol rompió en el momento preciso. “Hice una clasificación bastante buena para meterme en la final absoluta A, con la gente más rápida y eso me ayudó bastante a bajar y realizar la mínima para el Europeo”, analizaba en del Natación Ferrol. Un logró que Navarro tardó unos segundos en conocer y hacerlo por los aplausos y celebraciones de los suyos en las gradas de la piscina catalana. 

“Al llegar de espaldas no veo los tiempos”, cuenta Navarro, “primero veo a la gente que estaba animándome y todo el mundo se puso a gritar. Miré el tiempo y di un respiro de alivio, de satisfacción porque todo salió como lo había esperado. Fue muy emocionante”. Señala este nadador nacido en Mallorca y “aterrizado” en Ferrol con tan sólo dos añitos.  Y es que en ese suspiro se resumió el trabajo de casi todo un año en el Centro Galego de Tecnificación Deportiva de Pontevedra y también en las diferentes citas con su club, aquí y fuera –”todo tiene una recompensa siempre. Todo el esfuerzo, el sacrificio y lo que dejé atrás”, sentencia Navarro–.

Mejoría continua

En su segundo año en el CGTD, el del Natación Ferrol alaba un grupo de entrenamiento que ha sido también clave para alcanzar esta planificada meta. “Nos ayudamos entre todos”, cuenta, “es algo crucial que tus compañeros de entrenamiento  sean tus amigos, te ayudan a seguir adelante, si estás mal te animan. Considero que, además de buenos entrenadores  y ganas, sin unos buenos compañeros es muy complicado llegar a tener un buen nivel”. 

Si bien todavía pronto, Navarro conoce un poco de su hoja de ruta a este Europeo, con sendas concentraciones con la selección a mediados de abril y tras el Nacional de Mallorca. Unos meses de espera y de continuación de un intenso trabajo que ha quedado reflejado en esta clasificación, dando al local “orgullo de que todo está saliendo bien. Hay una mejora continua y progresiva de mis marcas, físicamente me encuentro mejor. Tengo muchas ganas de seguir trabajando”.