Un hombre de 51 años acusado de amenazar de muerte al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en Twitter ha aceptado este jueves una condena de dos años de prisión, una multa de 480 euros y la obligación de asistir a un curso sobre valores e igualdad tras alcanzar un pacto con el fiscal a cambio de la suspensión de la entrada en prisión.

El procesado, que según ha explicado a los periodistas trabaja en la Administración valenciana, ha admitido ser el responsable de varios comentarios publicados en la referida red social en los que aseguraba, entre otras cosas, que si el presidente “profanaba la tumba de Franco”, lo ejecutaría.

Inicialmente el Ministerio Público solicitaba una condena de tres años de prisión y una multa de 3.000 euros por un delito de odio.

Aunque antes de la celebración de la vista el procesado se oponía al acuerdo de conformidad y defendía que había sido víctima de una suplantación de identidad, una vez en la sala y tras conversar con el presidente de la misma, el fiscal (el invidente Héctor Melero) y su letrado a puerta cerrada, finalmente ha admitido los hechos.

La sentencia ha sido declarada firme tras expresar las partes su compromiso de no presentar recurso (en el proceso no había más acusación que la que ha ejercido el fiscal).

La Unidad Central de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional detectó el 18 de junio de 2018 comentarios emitidos el día anterior por el perfil del procesado en los que amenazaba con matar a Sánchez, al que llamaba “rojo bastardo”, y aseguraba que si el presidente “profanaba la tumba de Franco”, lo ejecutaría.

El procesado también publicó desde su vivienda en Paterna (Valencia): “Franco saldrá de su tumba pero Pedro Sánchez entrará en otra”.

El acusado, según el escrito de acusación del fiscal con el que se ha conformado el procesado, mencionó el perfil en Twitter del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez Pérez-Castejón, @sanchezcastejon, una cuenta a la que seguían entonces 883.000 usuarios (actualmente 1,6 millones), al responderle para tener así una mayor visibilidad