El PSOE ha respondido este martes al PP que "jamás superó que los ciudadanos le enviaran a la oposición por mentir" tras los atentados del 11 de marzo de 2004 y ha añadido que es el mismo partido que "sigue diciendo que hay armas de destrucción masiva en Irak".
"No han aprendido nada en 20 años", han recalcado fuentes socialistas, que han reaccionado así a las denuncias de los populares tras las protestas de anoche en Ferraz.
Según el PP, el Ministerio del Interior obligó a la policía a cargar de "manera injusta" contra los manifestantes que protestaron contra la ley de amnistía frente a la sede nacional socialista.
"No vemos condenas. Ni a los ataques a las sedes, ni a los vivas a Franco, ni a los gritos contra la Constitución, el jefe del Estado y el presidente", han lamentado desde el PSOE.
También han cuestionado el respaldo del PP a las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado, que "ayer casi ven superada su línea y en riesgo su integridad física".
Fuentes del PP han insistido en que pese "a las mentiras de este Gobierno", el PP no ha convocado concentración alguna en Ferraz, a diferencia de las concentraciones que sufrió esta formación en marzo de 2004 después de los atentados del 11M.
El presidente de la Junta de Comunidades y secretario general de los socialistas en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha pedido respeto para su partido, "el que más ha luchado por la libertad en España".
A través de un mensaje escrito en su perfil de la red social X, antes Twitter, García-Page ha condenado este martes las concentraciones y actos de protesta que se han celebrado ante las sedes del partido desde hace varios días y ha advertido de que "imitar a los violentos en Cataluña atacando ahora a las sedes del PSOE es tanto como minimizar lo que pasó allí".
"Pido respeto para un partido que fue perseguido y tuvo que soportar la clandestinidad y que es el que más ha luchado por la libertad en España", ha señalado García-Page.
Este lunes, cientos de personas se manifestaron ante las sedes del PSOE de Toledo y de Albacete para protestar contra la amnistía a los involucrados en el 'procés' y contra la investidura de Pedro Sánchez.
En Madrid, un grupo de manifestantes, algunos encapuchados y ataviados con máscaras, encendieron bengalas, petardos y lanzaron botes de humo al grito de "¡Ni un paso atrás!" o "la sede del PSOE la vamos a quemar", ante lo cual tuvieron que actuar los antidisturbios.