Un vecino de Cedeira de 67 años fue sorprendido el pasado fin de semana circulando en su vehículo a 173 kilómetros por hora en una carretera limitada a 80. Según detalló hoy la Guardia Civil, que investigó el suceso, el incidente tuvo lugar durante la mañana de ayer a la altura del punto kilométrico 1+500 del vial N-655 –que une el polígono naronés Río do Pozo con Vilar y Fonta–, a la altura del término municipal de Ferrol.
Al parecer una patrulla de la Unidad de Tráfico de la ciudad naval se encontraba realizando labores de control de velocidad cuando vio pasar al conductor. Tras comprobar que el cinemómetro marcaba que el hombre circulaba casi 100 kilómetros por encima del límite del vial, los agentes de la Benemérita iniciaron su persecución e interceptación del turismo.
Una vez detenido el coche, los guardias procedieron a identificar al hombre para instruir diligencias e iniciar la investigación por un presunto delito contra la seguridad vial.
Respecto a esta infracción, desde el Instituto Armado se recordó que el hombre “se enfrenta a posibles consecuencias legales”, tales como la pérdida de su permiso de conducir entre uno y cuatro años, así como de tres a seis meses de cárcel –o en su defecto una multa de seis a doce meses o hasta 90 días de trabajos “en beneficios a la comunidad–.
Por otro lado, una mujer tuvo que ser trasladada esta tarde al centro hospitalario tras ser atropellada en pleno centro de Ferrol.
Tal y como detalló la Policía Local, el incidente tuvo lugar poco antes de las 15.30 horas, cuando la mujer, vecina de Ares de 50 años, se encontraba cruzando por el paso de peatones situado a las puertas de Oficina de Empleo del barrio de Esteiro, en el número 135 de la avenida de Vigo. De igual modo, desde el cuerpo de seguridad municipal se señaló que, pese a lo aparatoso del accidente, la mujer no presentaba lesiones de gravedad y estuvo consciente en todo momento.
De este modo, el servicio de Urxencias Sanitarias de Galicia-061 movilizó hasta el punto una ambulancia asistencial, que trasladó a la mujer al hospital Arquitecto Marcide de Ferrol, donde fue dada de alta el mismo día. En paralelo, la unidad de Atestados de la Policía Local reguló el tráfico hasta que se resolvió el incidente.