A nadie se le escapa que los plenos municipales de Ferrol son un éxito arrollador. La combinación de sublime dialéctica y excitante solemnidad que derrocha cada sesión los ha convertido, de un tiempo a esta parte, en todo un fenómeno viral con millones de seguidores en todo el mundo. El extraordinario carisma que emana de cada representante y la mordacidad de sus respuestas es capaz de lograr que cada intervención, de unos siete minutos de duración, se sienta como un suspiro, dejando a las masas enfervorecidas, que, como ya es habitual, colapsan cada milímetro de la plaza de Armas, suplicando por más.
Sin embargo, a veces las palabras no son suficientes para expresar tan elaborados argumentos, empañando la pureza del momento con la obscena duda de quién habrá vencido en cada despiadado intercambio. Es por ello que, tras un acuerdo parcial durante la reunión de la Xunta de Portavoces del pasado 20 de mayo, que se mantuvo en secreto hasta ayer jueves por motivos que ahora se antojan obvios, se tomó la determinación de zanjar las disputas consistoriales del modo más civilizado ideado por el ser humano: mediante cruentas batallas de inocentes criaturas.
En efecto, a partir del próximo pleno ordinario, programado inicialmente para el 30 de enero a las 19.00 horas, cualquier enfrentamiento entre concejales se dirimirá con un combate de Pokémon. Tal y como detalló ayer el alcalde, José Manuel Rey, durante una rueda de prensa sorpresa, a lo largo de los últimos meses se ha desarrollado de forma sorprendentemente discreta toda la infraestructura necesaria para que el palacio consistorial pueda alojar con toda seguridad estos duelos, que se antojan numerosos y encarnizados.
“Ferrol ama ós seus Pokémon. Desde os shellder e clamperl da ría ata os binacles da costa Ártabra e mesmo as manadas de swinub percorrendo os nosos montes e ás veces as nosas rúas”, relató con un aire nostálgico el regidor. A su juicio y, por extensión, al del resto de la corporación, nada honra más el patrimonio natural de una región que enfrentar en combate singular a sus criaturas más representativas. Así, el alcalde explicó que, desde que se alcanzó el acuerdo, se han celebrado “enfrontamentos piloto” a puerta cerrada en el salón de plenos de forma periódica para estudiar el mejor modo de llevar a cabo las batallas sin dañar la estructura del palacio consistorial.
“Decidiuse que cada concelleiro poderá facer uso de até tres Pokémon por sesión plenaria. Todos eles deberán ser de nivel vinte como máximo agás unha única criatura, representante do grupo, que poderá chegar a cincuenta”, explicó Rey Varela. De esta forma, cada vez que se alcance un punto discordante, los ediles enfrentados podrán optar por dejar de lado las palabras y demostrar quién es el mejor entrenador. Serán, detalló, enfrentamientos de una ronda, 1v1, de forma que cada concejal podrá participar en tres combates por sesión. Asimismo, se ha instalado un Centro Pokémon junto al Rexistro municipal, al revelar un estudio externo que se trata del área con mayor espacio del palacio consistorial.
Las reglas ya están claras y la fecha en el horizonte, pero queda la duda de qué monstruos de bolsillo escogerá cada concejal. Y es que, si bien el Pokémon representante de cada grupo será de conocimiento público desde el inicio de la sesión, las elecciones personales serán absolutamente secretas, pudiendo dar lugar a inesperados pactos capaces de ruborizar al más tenaz de los titanes.
En cualquier caso, el regidor avanzó que el grupo de gobierno tendrá al frente a un charizard variocolor, porque un wingull era demasiado evidente y siempre tiene que haber alguno. El resto de grupos, aunque reacios al principio, decidieron compartir con sus conciudadanos sus alineaciones, de modo que los socialistas llevarán un charizard original, insistiendo en que todos Pokémon del grupo popular son heredados del mandato de Ángel Mato; el BNG, que inicialmente se opuso a esta noble forma de debate, opta por unpiloswine, porque, aunque resulta una elección obvia, también lo es el canon de Urbaser o los terrenos de la Autoridad Portuaria. Finalmente, Ferrol en Común (FeC) detalló que, tras decantarse en un principio por un magikarp -dado que “o rodillo da maioría absoluta” de los populares hacía inalcanzable la victoria-, finalmente alzarán a pikachu como su campeón, al verse revitalizado el portavoz de la formación, Jorge Suárez, por el Premio Naranja de la prensa ferrolana.
Llegados a este punto sobra decir que esto es una inocentada y que, lamentablemente, no existen los Pokémon, al menos en el área de Ferrolterra. Desde Diario de Ferrol deseamos que hayan disfrutado tanto de estas líneas como nosotros al escribirlas.