Los trabajos de la calle Pardo Bajo deberían tener los días contados, ya que el plazo de ejecución previsto concluye la próxima semana, concretamente el día 22, una fecha que, a todas luces, no podrá cumplirse.
Aunque oficialmente no hubo una paralización como tal de las mismas, lo cierto es que esta adaptación del vial para los usos actuales que ya viene desempeñando –peatonal y de hostelería– se ha visto interrumpida desde su comienzo, en el mes de febrero, por cuestiones ajenas al desarrollo habitual de la obra. Por una parte, en el mes de abril los trabajos se vieron afectados por la falta de material, como consecuencia de la huelga de transportes. Posteriormente, ese mismo mes, en cuanto comenzaron las excavaciones, vio la luz un alcatruz, es decir, una conexión de agua que podría datar de finales del XVIII o principios del XIX y que fue preciso analizar y que, dado su buen estado de conservación, se procedió a su limpieza para posterior aprovechamiento.
Todo esto motivó retrasos que la empresa adjudicataria ha puesto sorbe la mesa a la hora de presentar al Concello una petición de prórroga de dos meses más sobre la fecha de conclusión prevista.
El concejal de Urbanismo, Julián Reina, explicó esta semana que los trabajos “teñen que avanzar e tentar chegar a estar listos na data”. Urgía, de este modo, a la empresa a acelerar en todo lo posible la ejecución y asegurando, además, que en ningún caso se barajan dos meses más de obras.
Reina apuntó que se ha hablado con los hosteleros y que se está insistiendo “dende a parte técnica e política” en que es necesario imprimir ritmo a la obra, planteando “un empuxón” en esta fase final.
En este sentido, aseguró que una vez realizados los trabajos relacionados con las conexiones pluviales, en breve se comenzará con la instalación de la losa de hormigón, que ya permitirá ver un importante avance en la apa riencia del vial.
Sea como fuere, aunque finalmente se establezca una prórroga, Urbanismo no considera que haya motivos suficientes para que se prolongue mucho más, sobre todo teniendo en cuenta que la hostelería ya no ha podido montar terrazas en Semana Santa y se está viendo perjudicada ya por en temporada de verano.