El domingo amaneció despejado y con temperaturas más que agradables. Caminatas por los paseos marítimos, terrazas con gente y niños en las plazas fue una visión que pese a parecer cotidiana hacía tiempo que no se veía en la ciudad naval.
El paraguas y los chubasqueros fueron compañeros de viaje día tras día desde hace exactamente 30.
El mes de octubre comenzó seco y en los primeros diez días solamente uno llovió. A partir de entonces el panorama cambió de tal forma que desde que el día 13 empezó a llover no paró hasta este pasado sábado. La tregua de la jornada de hoy no parece que vaya a tener continuidad y tanto para mañana como para el martes la previsión meteorológica habla ya de lloviznas.
A estas lluvias persistentes hay que sumar los fuertes vientos que, aunque ya se han alejado, dejaron en días pasados graves efectos.
Unas ráfagas que alcanzaron valores máximos de hasta 80,7 km/h a principios de mes pero que desde que comenzó octubre contó con varias jornadas de fuertes vientos –de entre 63 y 72 kilómetros por hora–. El pasado año, en las mismas fechas, no se llegaron a superar los valores de 63km/h ni un solo día.
Pero si los vientos fueron significativos –se sucedieron los temporales Celine, Ciarán y Domingos en menos de un mes–, las lluvias fueron llamativas por su persistencia.
Los 30 días continuados de agua hicieron que se alcanzase una cifra récord, ya que el año pasado desde el 1 de octubre al 13 de noviembre hubo lluvias en la ciudad naval un total de 18 días, frente a los 31 de este año, en el mismo plazo de tiempo.
Esta diferencia no solo se da con respecto al año 2022 sino que hay que remontarse al año 2019 para que se contabilizasen tantos días seguidos de agua. Fue el 30 de octubre de 1019 cuando comenzó a llover y no paró hasta el día 1 de diciembre. Un total de 33 días de lluvia continuada, en la que los valores alcanzaron los 42,5 mm/h. En esta ocasión no se lograron esas cifras aunque los valores de agua caída sí llegaron a 42,9, precisamente el 13 de octubre dando comienzo a este mes completo de lluvias sin tregua que se produjo.
Aunque en las últimas semanas la lluvia estuvo acompañada de bajada de temperaturas, con varias jornadas de 13 grados y unos cuantos días con algo menos, desde el viernes ha habido una subida paulatina de temperatura que llevó a que ayer se alcanzasen los 18º. Estamos ante el denominado veranillo de San Martín, que se caracteriza por un tiempo “estable” intercalado en medio del otoño, a mediados de noviembre