La construcción de viviendas en el área de Ferrolterra continúa manteniendo resultados positivos, según el último informe del Instituto Galego de Estatística (IGE), correspondiente al mes de febrero y publicado esta misma semana. Tal y como recoge el documento, el conjunto de las tres comarcas encadena su segundo mes superando las cifras de licencias municipales de 2022, al tiempo que también mejora el balance de comienzos de año.
Si bien los números del informe, tanto a nivel ártabro como gallego, muestran una diferencia abismal en comparación con el mercado hasta 2007 –básicamente por la burbuja inmobiliaria que desencadenó una de las mayores crisis económicas de las últimas décadas–, en años recientes, especialmente a partir de 2018, se han caracterizado por una continua estabilidad; es decir, por constantes picos y valles de demanda que no terminan de alejarse de la media comarcal.
Es por ello que, aún registrándose en términos absolutos una mejoría en el conjunto de Ferrolterra, las variaciones contempladas no son especialmente dramáticas, lo que se podría traducir en una confianza en el mercado por parte de los compradores e inversiones sin llegar a convertirlo en algo insostenible.
Así, según el mapa del IGE, el pasado mes de febrero se tramitaron en las tres comarcas un total de 30 licencias, cuatro más que en enero –y todas ellas en las áreas de Ortegal y el Eume, manteniendo Ferrol el mismo número global, 26, aun con importantes diferencias a nivel municipal–. En comparación al mismo período del año pasado, el entorno de la ciudad naval registró nueve solicitudes menos; un resultado que se ve ligeramente paliado gracias a otras dos en Mañón, lo que reduciría la diferencia hasta las siete licencias de construcción.
Centrándonos en las cifras individuales de los concellos, el informe muestra que en la comarca de Ortegal el pasado febrero solo se solicitó un permiso en Ortigueira, mientras que en enero no hubo ninguno y en el mismo período del año anterior fueron los dos ya mencionados en Mañón. El Eume, por su parte, contó con tres peticiones de licencias en febrero del presente ejercicio –dos en Cabanas y una en Pontedeume–, mientras que no hubo ninguna en los espacios temporales antes mencionados como referencia.
La comarca de Ferrol, al contar con un mayor número de municipios y, por tanto, de habitantes, registró mucho más movimiento. La ciudad naval, por ejemplo, aumentó periódicamente su demanda, pasando de ocho solicitudes en febrero de 2022 a diez en enero de 2023 y a once un mes más tarde. Narón, por su parte, tuvo un comienzo de año más fuerte, con cinco peticiones, mientras que los otros dos períodos, el presente febrero y el del año pasado, tuvieron dos cada uno.
Otro municipio que mejoró notablemente sus resultados fue Ares, que pasó de contar tanto en 2022 como a inicios de este ejercicio una sola solicitud a cinco un mes más tarde. Por otro lado, Moeche continúa sin nuevas licencias, mientras que San Sadurniño y As Somozas apenas contaron con una el pasado mes y en febrero del año pasado, respectivamente. Por último, el peor resultado tuvo lugar en Valdoviño, donde se pasó de cuatro solicitudes en el mes de referencia de 2022 a uno a inicios de año y ninguna en febrero de 2023.