Durante su visita a China, el empresario y director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, sorprendió al abstenerse de publicar cualquier mensaje en Twitter, lo que representa su mayor pausa en la plataforma desde junio de 2022.
Esta llamativa ausencia en la red social se produce en un contexto en el que varias plataformas de redes sociales extranjeras, incluyendo Twitter y Facebook, están bloqueadas en China, aunque se puede acceder a ellas a través de redes privadas virtuales (VPN).
Cabe destacar que el uso personal de VPN es ilegal en China, aunque su aplicación y cumplimiento son inconsistentes, lo que podría haber influido en la decisión de Musk de no tuitear durante su visita, a pesar de que muchos funcionarios del gigante asiático compartieran información al respecto de las reuniones que abordó el empresario a través de la mencionada red social.
Al despegar de Shanghái (este) en su jet privado, Musk retomó su actividad en Twitter, pero en esta ocasión compartió detalles relacionados con SpaceX, su compañía de exploración espacial.
Durante su visita de tres días, Musk se reunió con funcionarios del Gobierno chino y líderes empresariales locales.
En estas reuniones, el empresario destacó que "los intereses de Estados Unidos y de China están interconectados como hermanos siameses" y que "Tesla se opone al desacople y espera seguir expandiendo sus negocios en China".
Entre las figuras con las que se reunió Musk, destacan las del ministro de Exteriores, Qin Gang, el de Comercio, Wang Wentao, y el de Industria e Información Tecnológica, Jin Zhuanglong.
El empresario manifestó su interés en desarrollar productos amigables con el medio ambiente específicamente para el mercado chino, mostrando así su compromiso con la sostenibilidad y las necesidades del país.
Aunque durante su visita no se realizaron acuerdos concretos ni se hicieron anuncios oficiales sobre la expansión de la fábrica de Shanghái, se espera que esta visita siente las bases para futuras inversiones de Tesla en China, aprovechando el crecimiento proyectado en las ventas de vehículos eléctricos en el país.
En 2019, Tesla abrió en la metrópoli de Shanghái su primera "gigafactoría" fuera de Estados Unidos, planta de la que salieron más de 710.000 vehículos en 2022, lo que, según el rotativo oficial Global Times, supone algo más de la mitad de sus ventas a nivel global.
En abril, la marca anunció que abrirá una nueva fábrica en Shanghái para producir sus "Megapack", unas baterías de almacenamiento de energía empleadas para estabilizar las redes eléctricas y evitar cortes de suministro.
Esta nueva planta de Tesla en Shanghái tendrá una capacidad de producción de unas 10.000 unidades del citado producto cada año, según reveló la compañía.