El recuento parcial confirma la clara victoria de la formación conservadora HDZ, del primer ministro Andrej Plenkovic, en las elecciones legislativas celebradas este miércoles en Croacia.
Según el recuento del 77 % de los votos, la HDZ sumó 64 escaños, y su rival principal, la coalición Ríos de justicia, que lidera el socialdemócrata SDP, obtuvo 42.
En tercer lugar quedó el partido nacionalista de derechas Movimiento Patriótico, con 11 diputados, seguido por el también derechista Most (Puente), con 11 diputados, el ecologista de izquierdas Mozemo (Podemos) con 9 diputados y la regionalista IDS, con 3, así como dos partidos centristas, Fokus y NP, con 2, y un diputado, respectivamente.
Los analistas coinciden en que los conservadores en el poder parten de una buena posición pero se encuentran bastante por debajo de los 76 escaños necesarios para una mayoría parlamentaria, y, en principio, todos los partidos han descartado en la campaña la posibilidad de entrar en una coalición con el HDZ debido a sus escándalos por corrupción.
Sin embargo, Movimiento Patriótico ya matizó la negativa a negociar con los conservadores poco después de conocerse las primeras proyecciones.
Los expertos anticipan que la ventaja del HDZ podría reducirse algo a medida que continúe el escrutinio, especialmente en Zagreb, donde aún falta por contabilizar la mayoría de los votos y donde las fuerzas de izquierda tienen mayor presencia.
Branko Bacic, viceprimer ministro de Gobierno y número dos en la HDZ, se mostró satisfecho con el resultado y confió en que puedan forjar un gobierno estable.
Por otro lado, un representante de Ríos de justicia, Ivica Puljak, ha señalado que “si todos los partidos se atienen a lo que han prometido antes de las elecciones, de que no formarán gobierno con el HDZ, entonces sigue siendo posible una amplia coalición opositora”.
Las acusaciones de corrupción contra la formación de Plenkovic, que llevó a la dimisión de varios ministros esta legislatura, hace que la búsqueda de socios sea difícil, pero crear una alternativa en torno a los socialdemócratas también se prevé complicado.
Plenkovic, que ha liderado el Gobierno desde 2016, hizo una campaña centrada en la estabilidad y en logros como la entrada de Croacia en la zona del euro y el espacio Schengen.
Sin embargo, su partido, que ha gobernado en 25 de los 33 años desde la independencia de Croacia, se ha visto salpicado por escándalos de corrupción, lo que ha erosionado su credibilidad