Imaginen que Pedro Sánchez y su mujer construyen un muro de piedra en una parcela de dominio público para impedir el acceso de los vecinos a una playa que está bajo su chalet. Si tal hecho ocurriera, tendríamos a los medios informativos hablando de ello todos los días, y a Feijóo diciendo que España no merece un presidente que se coloca por encima de las leyes. Pues bien, esto es lo que casualmente ha hecho Feijóo en Moaña. Como este asunto escapa a la competencia de la justicia ordinaria, nos encontramos con que su mujer ha solicitado la legalización de la obra para evitar el derribo del muro. Recuerdo que a Pablo Iglesias e Irene Montero les montaron la del Mundial porque siendo de izquierdas vivían en un chalet, y eso que era legal y que explicaron cómo lo iban a pagar, nada parecido a quien vive en un ático de lujo sin saber quien se lo ha pagado. Supongo que ustedes me entienden.