Coincidiendo con la conmemoración del mes de transporte adaptado que celebra la Asociación Sociocultural ASCM, la entidad que aglutina al colectivo de personas con movilidad reducida ha denunciado las dificultades que se encuentran en el uso diario del tren, especialmente en verano, para poder acudir a las playas, en el tramo Ferrol-Miño.
La asociación explica que son muchas las personas con discapacidad que quieren desplazarse hacia zonas de playa, de ocio o estar en contacto con la naturaleza y esto resulta complicado si el traslado se quiere realizar en tren. De este modo, la ASCM pone como ejemplo que el recorrido de Ferrol a Miño solo cuenta con un sitio para una silla y aquellos usuarios que utilizan sillas de ruedas manuales no disponen de servicio de Arendo (servicio gratuito de atención y asistencia a viajeros con discapacidad o movilidad reducida de Renfe Operadora) a su llegada a la estación de Miño. De hecho, para poder beneficiarse de este tendrían que hacer una reserva con antelación.
Estos problemas, como explican desde la entidad ferrolana, se extrapolan a viajar en muchos de los recorridos que ofrece Renfe y así el técnico de accesibilidad de la ASCM ya ha remitido a la Defensora del Pueblo una denuncia que ha sido admitido a trámite, tras haber evaluado ciertos aspectos en cuanto a la accesibilidad de los medios de esta compañía.
Con estas quejas públicas, la Asociación Sociocultural ASCM quiere hacer visible los problemas que viven las personas con movilidad reducida a la hora de viajar en tren y luchar porque se tomen las medidas y se cumplan las normas para esto cambie.
La entidad dedica cada mes a una de sus áreas de actuación más influyentes y en julio lo centra en las mejoras en los desplazamientos, bajo el eslogan “Seguimos reclamando un transporte adaptado” y que sea de utilidad a a las personas que tienen movilidad reducida.