El Real Madrid alcanzó el liderato provisional de LaLiga, imponiéndose bajo un diluvio al Barcelona gracias a una primera parte letal, al ritmo de Vinicius, y defendiendo cuando apareció la fatiga física tras el desgaste del Liverpool, ante un Barcelona que acarició el empate hasta el último suspiro y dio un paso atrás en sus aspiraciones.
La defensa de tres centrales de Koeman tiene riesgos, invita al atrevimiento al rival. Zidane no lo fue sin tridente ofensivo, sentando a Marco Asensio, pero sí en su consigna de ser vertical con balón. Los carrileros adelantados ofrecían la posibilidad de castigar sus espaldas y a los trece minutos Valverde no lo pensó. Salió disparado hacia campo contrario, superó a Jordi Alba, encontró a Lucas Vázquez donde debía estar el lateral y al centro apareció la magia infinita de Benzema.
Exhibiendo la contundencia que tanto añoró el conjunto madridista en sus momentos de irregularidad, Benzema extendía su racha más dulce. Clave en el asalto al liderato con siete jornadas seguidas marcando. Su trascendencia se extendía incluso a labores defensivas, apareciendo en su propia área para robar a De Jong. El ejemplo de la unión en el esfuerzo de un Real Madrid comprometido.
Redujo al máximo los espacios a Messi. A base de ayudas. Y tras el robo de pelota corrió. Así Vinicius exhibió virtudes. Auto pase ante Mingueza y desborde contra Araújo. Atraía rivales y era derribado. Así llegó una falta en la que Kroos se alió con la fortuna. Su disparo golpeó en Dest y lo convirtió en un imposible para Ter Stegen.
El factor físico mandó y Koeman arriesgó quitando a un lateral como Dest para dar paso a Griezmann. El escenario cambió de golpe. En pleno diluvio las ocasiones pasaron a ser azulgranas y los contragolpes madridistas perdieron efectividad. A la hora de partido apareció un rematador inesperado. Con la espinilla remataba Mingueza el centro de Alba que dejaba pasar por debajo de las piernas Griezmann.
El clásico se apretaba. El Real Madrid comenzaba a mirar el reloj porque le faltó precisión en los últimos metros. Las fuerzas ya flaqueaban pero los blancos aguantaron y durmieron líderes.
Ficha
Real Madrid: Courtois; Lucas Vázquez (Odriozola, m.43), Militao, Nacho, Mendy; Casemiro, Kroos (Marcelo, m.72), Modric, Valverde (Marco Asensio, m.61); Vinicius (Isco, m.72) y Benzema (Mariano, m.72).
Barcelona: Ter Stegen; Dest (Griezmann, m.46), Mingueza, Araújo (Ilaix Moriba, m.72), Lenglet, Jordi Alba; Busquets (Sergi Roberto, m.64), De Jong, Pedri (Braithwaite, m.81); Dembélé (Trincao, m.81) y Messi.
Goles: 1-0, m.13: Benzema. 2-0, m.28: Kroos. 2-1, m.60: Mingueza.
Árbitro: Gil Manzano (Comité Extremeño). Amonestó a Nacho (69) por el Real Madrid, y a Pedri (23), Araújo (26), Sergi Roberto (84) y Koeman por el Barcelona. Expulsó a Casemiro por doble tarjeta en el minuto 89.