Por su 18 cumpleaños Rafa Nadal le regaló a Carlos Alcaraz una clase magistral de tenis y el respeto de un campeón que lo da todo en la pista, jugando con un número uno mundial o con un recién llegado al que casi dobla la edad. Y así fue, al futuro del tenis español le pasó por encima el vendaval balear, que es el presente. En el partido en el que había quien quería ver si Rafa era capaz de ganarle un pulso al tiempo, no dejó lugar para las dudas y Alcaraz, pese a los nervios y las molestias físicas, permitió que vislumbrásemos lo que pueden ser grandes duelos