La decisión de Míchel Alonso de poner fin a su etapa en el Coruxo, con el que la temporada pasada se quedó cerca de meterse en la fase de ascenso y esta logró una meritoria clasificación para Segunda RFEF, lo deja a la espera de destino en el que continuar su trabajo. Mientras, el entrenador ferrolano hace balance de lo que ha sido este ejercicio, más complicado de lo normal, y de lo que espera para el futuro, siempre ligado al mundo del fútbol.
¿Qué valoración hace de la recién finalizada temporada ?
El inicio fue irregular, con un punto en cinco partidos en los que, además, no conseguimos marcar. Y eso, en un campeonato con tan pocas jornadas, condicionó el resto. Nos propusimos acabar con veinte puntos la primera fase, lo logramos, y la segunda fase la empezamos de cuartos y la acabamos de primeros, invictos, así que la podemos calificar de muy buena. Así que para el Coruxo el cómputo general habla de una buena temporada, porque en 26 partidos sumamos 36 puntos y eso, en una temporada normal, nos haría estar sextos o séptimos, porque la campaña anterior estábamos quintos con 38.
¿Esta campaña ha demostrado que sus equipos siempre van de menos a más?
Es algo que voy a tener que revisar, porque no es la primera vez que sucede y conlleva un riesgo. Aquí tuve apoyo para mantenerme en los malos momentos y me dieron la opción de enderezar el camino, pero esta temporada cayeron más de cincuenta entrenadores en esta categoría y a nosotros la primera fase nos condicionó.
¿Por qué decide poner fin a su etapa en el Coruxo, con el que todavía estaba vinculado?
Es una decisión pensada y meditada, pero que no fue fácil. Aquí estuve muy bien en todos los aspectos, tuve la confianza para trabajar con libertad y me sentí apoyado en los malos momentos. Pero el desgaste de la toma de decisiones en una temporada en la que durante muchos meses estuvimos jugando finales todas las semanas, unido a la sensación de que el trabajo que tenía que hacer aquí ya estaba hecho, me llevaron a esta decisión.
¿Le parece lógico que se diga que, si se marcha cuando aún tenía contrato, es porque ya tiene su futuro decidido?
Lo puede decir el que no me conozca. Pero a día de hoy aún no he hablado con ningún club, así que la decisión de irme del Coruxo no tiene que ver con tener otro sitio al que ir. En el Somozas ya tomé una decisión similar y entonces me fui para casa. Ahora lo vuelvo a hacer, pensando solamente en el Coruxo y luego que venga lo que tiene que venir.
¿Dejar al Coruxo en Segunda RFEF es dejarlo en la categoría que le resulta natural?
Creo que sí. Esta temporada, por todo (el formato de la competición, el subgrupo en el que estuvimos...), pensar en algo más de lo que hemos hecho era irreal. Una utopía.
¿Qué va a ser lo que más lo mueva a la hora de tomar una decisión de a dónde ir?
Un poco de todo. Si alguien te llama es porque quiere que estés en su proyecto, valora tu trayectoria profesional y puedes tener un cierto margen a la hora de trabajar. Por eso, más que la categoría en sí, me interesan esos condicionantes.
¿Su futuro pasa por los banquillos o por los despachos?
Cuando fiché en el Rápido de Bouzas de director deportivo venía de la experiencia de estar en la secretaría técnica del Deportivo... y la verdad es que es un trabajo que me gusta. Pero entrenar, diseñar entrenamientos para el día a día, también me gusta mucho. Así que iré a donde me lleve el fútbol, pero lo que tengo claro es que las dos funciones me gustan.
La próxima campaña va a ser difícil para muchos
Después de una temporada, la 20/21, condicionada por la pandemia, el fútbol espera empezar a recuperarse en una campaña, la 21/22, en la que habrá una nueva categoría: Primera RFEF. Míchel Alonso explica lo que espera de esta nueva organización y muestra su esperanza de que los gallegos estén más arriba .
¿Cómo ve la situación actual de fútbol gallego?
Podría estar mejor. Solo hay un equipo en Primera, otro en Segunda con problemas, y tres (Racing, Deportivo y Celta B) en Primera RFEF, así que es el momento de que alguno de estos últimos vaya para más arriba. Que el Deportivo esté tan abajo mermó al fútbol gallego, pero esperemos que vengan tiempos mejores.
¿El fútbol se empezará a recuperar a partir de ahora tras una temporada tan dura como la actual?
La siguiente campaña va a ser complicada para muchos clubes pequeños o medianos: porque esta campaña no tuvieron ingresos, por la reestructuración de las categorías... Quiero ver lo que va a pasar, pero intuyo que algunos lo van a pasar mal.
¿Ve viable cinco categorías a nivel nacional?
A más categorías, habrá más complicación. Y el fútbol de más abajo va a tener menos interés. Por ejemplo, Segunda RFEF va a ser como una Tercera ampliada o una Segunda B mermada... A ver cómo se asienta todo, pero las categorías de abajo lo van a pasar mal.