La Medalla de Oro de Galicia, la máxima condecoración que concede el Gobierno autonómico, fue otorgada al equipo que vacuna para llegar al “fin del covid”, momento cuya llegada desearon tanto el presidente gallego, Alberto Núñez Feijóo, como el jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez.
Feijóo, en la ceremonia en la Ciudad de la Cultura bajo la presidencia de Felipe VI, señaló en un discurso en el que por momentos se le resquebrajó la voz, que gracias al dispositivo que administra las distintas vacunas “afrontamos el final de esta pesadilla”.
Por su parte, Sánchez se expresó en términos similares, al indicar que “el principio del fin del covid ha llegado a nuestro país a través de vuestras manos”, en alusión a los sanitarios, después de comentar que los ciudadanos acudieron “masivamente” a los llamamientos “para protegerse y proteger al conjunto”.
Gracias el esfuerzo “estamos en un punto diferente, cargado y repleto de esperanza”, subrayó el presidente del Gobierno, que indicó que el ritmo de administración de dosis es “imparable” y puso el acento en el “valor incalculable de la investigación y de la ciencia”.
El camino que queda por delante ha de ser “colectivo”, y repleto de “compañerismo y solidaridad”, opinó Sánchez en este Día de Galicia, mientras que Feijóo ahondó en el hecho de que “en crisis como la que desgraciadamente aún vivimos la cercanía humana es imprescindible”.
Ambos recordaron a los que ya no están, a causa del virus, y Feijóo extendió el homenaje a las víctimas del accidente del Alvia, “una tragedia que no olvidamos y ante la que también contamos con el cariño y el apoyo, en su momento, de la Casa Real”.
Asimismo, el mandatario gallego le dijo al rey que “toda Galicia agradece su labor como jefe de Estado, al frente de una institución legitimada en la carta de derechos y libertades, la Constitución”, al tiempo que manifestó su absoluta defensa “de ese texto que nos une” y que a la vez “garantiza el autogobierno”.
Porque Galicia, manifestó Feijóo, “cohesiona” y permite “ser vivida sin menoscabo de la pluralidad”. “Galicia es una identidad fraternal”, afirmó el presidente gallego, y se conmovió al hacerlo.
Asimismo, Feijóo se dirigió a Sánchez con varias reivindicaciones, para decirle que esperaba que su presencia suponga un respaldo a los grandes retos que están por delante y que precisan de cooperación y apoyo.
En este 2021, Feijóo desea “ver por fin el AVE entrando en Galicia”, aguarda “poner los cimientos de los ambiciosos proyectos de reactivación de nuestra economía con el impulso de los fondos europeos Next Generation” y, aparte, contar con el Ejecutivo para que el Xacobeo 21-22 “sea el mejor de nuestra historia”.
Por su parte, Yolanda Moares, la enfermera que formó parte del equipo que atendió a la primera vacunada de Galicia, Nieves Cabo, incidió igualmente en la unidad tan necesaria y dio las gracias a los presentes por el gesto de “cariño y gratitud”.
Después de recoger la placa y el diploma, mostró su “tristeza” por todos aquellos para los que la vacuna no llegó a tiempo y recordó que cuando empezaron con la inoculación repetían “incansablemente” que era el principio del fin, un pensamiento que todavía mantienen muy presente.
Asimismo, Moares pidió que su disciplina gane “capacidad” y sea “más útil”, porque “estamos llamados a más”, zanjó.