El hombre de 54 años detenido por el crimen de un niño de 9 en Lardero (La Rioja) estaba en libertad condicional desde abril de 2020 tras haber sido condenado por el asesinato y agresión sexual a una joven, a la que acuchilló 17 veces en 1998, cinco años después de haber sido sentenciado por otra agresión sexual.
La Policía Judicial de la Guardia Civil tenía previsto reconstruir los hechos que desencadenaron el homicidio de Álex la noche de este jueves, han indicado a Efe fuentes de la investigación; mientras, este viernes continúa la toma de declaraciones y la confección de la inspección técnico ocular.
El detenido, de nacionalidad española y vecino de Lardero, se encuentra desde anoche en las dependencias de la Guardia Civil en Logroño, donde puede permanecer hasta un máximo de 72 horas antes de pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Logroño, una vez que finalice la investigación de la Policía Judicial.
La Delegación del Gobierno en La Rioja ha informado este viernes de que el detenido fue condenado a 7 años de prisión por una agresión sexual en 1993, y por el asesinato y agresión sexual a una agente inmobiliaria, en agosto de 1998 en Logroño, fue sentenciado a 20 años y 10 años de prisión, respectivamente, una condena que cumplía en agosto de 2023.
En 2020, el detenido fue trasladado desde otra prisión a la de Logroño; en abril de ese año, quedó en libertad condicional y, de acuerdo a fuentes judiciales, a lo largo de la ejecución de la sentencia nunca se le concedió un permiso penitenciario.
La localidad de Lardero se ha despertado este lluvioso viernes con sentimientos a partes iguales de tristeza por la muerte Álex y de rabia por pensar si se pudiera haber evitado este homicidio después de los avisos que habían dado algunos padres en las últimas semanas de que un hombre "merodeaba" a los grupos de niñas que jugaban en el parque.
Según la Delegación del Gobierno, el pasado lunes, día 25, se denunció ante la Guardia Civil que, en el colegio Villa Patro de Lardero, cercano al parque donde despareció Álex, un varón invitó a una pequeña a irse con él para jugar con su hija, a lo que la menor no accedió.
Los datos aportados en la denuncia no permitían identificar al autor o vincularlo con la persona detenida este jueves, ha subrayado la Delegación.
"No hay palabras" es la frase más repetida este viernes en La Rioja y, en especial, en Lardero, uno de los municipios del área metropolitana de Logroño, a 5 kilómetros, con unos 11.500 vecinos, cuyo ayuntamiento ha decretado en un pleno extraordinario tres días de luto.
Alrededor de las siete de la tarde de este jueves, han narrado a Efe varios testigos, una niña de 11 años alertó a los adultos de que "el hombre que vigila" se había llevado a Álex del parque, e indicó el portal en el que vivía.
Ese hombre, en muchas ocasiones, se situaba cerca de los menores que jugaban en el parque y, al menos, dos veces había tratado de que niñas le acompañaran a su casa con la excusa de que tenía unos pajaritos muy bonitos, han dicho.
Susana Torres, madre de una de estas menores, ha señalado que su esposo, tras la alerta, subió al domicilio del detenido, llamó a la puerta y, cuando le abrieron, vio a un hombre con Álex en brazos y le dijo que se había "desmayado".
El niño se encontraba muy grave e inconsciente y los servicios sanitarios que acudieron no pudieron reanimarle y murió en el rellano de las escaleras, donde ya estaban agentes de la Guardia Civil y de la Policía Local junto al detenido.
Álex, quien estaba disfrazado de "la niña del exorcista" para celebrar Halloween, se encontraba en una fiesta familiar que se celebraba en un local junto al parque, al que salió para jugar con unos amigos y donde el detenido, con engaño, se lo llevó a su casa, situado en las inmediaciones.
Más de un centenar de personas se han concentrado este mediodía en el parque, donde tres grandes tiestos de claveles blancos han sido puestos a disposición de quien quisiera depositar uno bajo los columpios, que enseguida se han llenado de flores.
Esta ha sido una de las muchas muestras de solidaridad que se han sucedido este viernes, tanto en Lardero, donde vivía el pequeño, como en Logroño, donde cursaba tercero de Primaria en el colegio de Jesuitas.
Los cerca de 2.000 alumnos de este centro y los profesores han guardado un minuto de silencio bajo la lluvia con un mensaje unánime: "Siempre llevaremos a Álex en el corazón y recordaremos lo maravilloso que era".
Así lo ha asegurado el superior de la comunidad de Jesuitas, José Manuel Peco, acompañado por el director del centro, Hértor Olarte, quien ha explicado que los alumnos han recibido apoyo psicológico.
"Está siendo un día muy duro para toda la comunidad educativa, para mi especialmente como director y como padre de dos niños que compartieron clase con Álex y con su hermano", ha relatado.
Ha agregado que "era un niño que se hacía querer; todo el colegio lo conocía, era muy alegre, colaboraba en todo y estaba dispuesto a ayudar a cualquier profesor que se lo pedía", por lo que su muerte "será difícil de superar".
A las concentraciones en Logroño y en Lardero también ha acudido la presidenta del Gobierno riojano, Concha Andreu, quien, en declaraciones a los periodistas, ha dicho que siente "mucha rabia, impotencia y una pena enorme" por lo ocurrido.
El alcalde de la localidad, Manuel Vallejo, ha afirmado a Efe que "hay veces que no tienes palabras y esta es una de ellas".