Dos derrotas consecutivas –en Ceuta y en casa ante Móstoles– y la lesión de su buque insignia. Con estos antecedentes se desplaza hoy O Parrulo a la cancha del líder –18.30 horas, pabellón Agustín Mourís de Noia– para intentar salir de un bache que ha expulsado momentáneamente al equipo que prepara Óscar Vigo de los puestos de playoff de ascenso a Primera.

El Noia ha rozado la per­fección en estas diez primeras jornadas de Segunda División. Ocho victorias, un empate y la única derrota de la semana pasada en Peñíscola –segundo clasificado– jalonan la trayectoria de un equipo hecho para ascender a la máxima categoría del fútbol sala español, como recordó ayer el preparador parrulista en la previa.

“Sus resultados lo dicen todo”, señalaba el técnico sobre un contrincante que es “el principal candidato a ser campeón”. Vigo subrayó el balance goleador del rival, así como el potencial de la plantilla, recuerda, “con once jugadores de pista” de mucho nivel.

Sobre la baja de Adri, que tendrá que pasar por el quirófano tras la lesión sufrida en el encuentro de la semana pasada en A Malata, el entrenador de O Parrulo la define como “un mazazo. Tenemos que estar a su lado, ya no solo del Adri jugador, sino también del Adri persona; el equipo está con él y entre todos vamos a ayudar para que regrese pronto y nos vuelva a hacer fuertes”.

La preocupación de Vigo se justifica en el precedente más próximo, el inicio de esta campaña, pues en ninguno de los tres encuentros sin el ala ferrolano O Parrulo fue capaz de ganar.