Los trabajadores del metal de Cádiz han secundado este viernes su cuarto día consecutivo de huelga, un conflicto que se mantiene vivo porque, de momento, las negociaciones entre los sindicatos y la patronal han encallado.
La Federación de Empresarios del Metal de Cádiz (FEMCA) y los sindicatos han sido incapaces de llegar a un acuerdo en los dos intentos de negociación, uno de doce horas y otro, celebrado ayer, de ocho, que se han celebrado desde que el martes se iniciara una huelga que ha sembrado de incidentes y enfrentamientos la capital gaditana y los principales nudos industriales de la provincia.
Unos y otros se culpan de intransigencia, en un conflicto en el que los trabajadores no quieren renunciar a que sus salarios desde enero de 2021 se revisen de acuerdo con el IPC interanual, que se calculará en enero, para no perder poder adquisitivo.
La patronal, que cuando se inició la huelga planteaba una subida salarial fija del 0,5 % en 2021 y del 1 % en 2022 y 2023, ofreció después que fuera de un 1,5 % este año y un 1,75 % los dos siguientes.
En la última reunión, ha explicado el secretario general de la FEMCA, José Muñoz, se lanzó otra propuesta para compaginar los objetivos de ambos.
Constaba de una subida salarial fija del 2 % en 2021, 2022 y 2023 y que al final de este último año, cuando las empresas calculan que habrán recuperado ya el músculo financiero que han perdido por la pandemia, se hiciera una revisión y se actualizaran los salarios de estos tres años con una parte variable según el IPC.
De esa forma, los trabajadores recuperarían, aunque dentro de dos años, en una paga el poder adquisitivo que hubieran perdido en estos tres ejercicios.
La propuesta fue rechazada de plano por los sindicatos porque, han explicado, no consolidaba la revalorización de los salarios con el IPC ni, en su opinión, se garantiza que los trabajadores eventuales, el 75 por ciento de los 26.000 operarios del sector del metal que hay en Cádiz, llegaran a cobrar esa paga.
"¿Qué trabajador reclama luego esa cantidad para que no le vuelvan a llamar?", han preguntado los secretarios provinciales de Industria de UGT y CCOO, Antonio Montoro y Juan Linares, respectivamente.
Tras señalar que volverán a la mesa de negociación en cuanto se les llame, los sindicatos, que han convocado una manifestación para el próximo martes, han anunciado que las calles seguirán "vivas".
Los representantes sindicales han reivindicado también que las grandes empresas como Navantia o Acerinox, cuyos trabajadores se rigen por convenios propios, no hagan "nada para arreglar este conflicto" cuando "tienen mucho que decir porque son los pagadores de las industrias auxiliares del metal de Cádiz", ha indicado Linares, que también ha pedido que la política "mueva ficha".
Los incidentes de los pasados días se han suavizado hoy, aunque la Policía y los manifestantes han tenido un enfrentamiento cuando los agentes han evitado con pelotas de goma que la movilización cortara el puente de la Constitución de 1812, uno de los tres únicos accesos por carretera a la capital gaditana.
IU ha convocado concentraciones hoy en los ayuntamientos de apoyo a los trabajadores del metal, el mismo objetivo con el que esta tarde se celebra otra en la capital gaditana.