A principios de octubre abrió sus puertas el restaurante Quarantatrecento Parma (Avenida de Arteixo, 14. A Coruña), basado en la cocina parmesana y una amplia bodega de Emilia-Romaña. El nuevo local está regentado por Veronica Balan con la ayuda de su hija Cristina Balan, ambas originarias de Parma.
El restaurante es un italiano de verdad, de los que ofrecen comida realmente típica del país mediterráneo. Y además con inspiración en el epicentro de la gastronomía italiana: Parma fue declarada como "ciudad creativa de la gastronomía" por la UNESCO. “A muchas personas les gusta la cocina italiana, y Parma es uno de los destinos con mayor número de productos típicos protegidos por marcas de calidad en Italia: el Prosciutto di Parma, el Parmigiano Reggiano, el Culatello di Zibello, el champiñón de Borgotaro, la Coppa di Parma o los vinos Colli di Parma vienen de allí. Nosotras importamos todos los productos de Parma, tanto los tortelli, hechos a mano, como el jamón, el queso y el vino”, explica Cristina.
De momento triunfan especialmente varios platos: el lomo de bacalao a la mediterránea, el solomillo de ternera con mousse de setas y tiras de boniato, los rollitos de roast beef con salsa Bearnesa, el caprese de búfala con tomate cherry tricolor confitado y gambas o los famosos tortelli di zucca Mantovani. El restaurante ha preparado además una propuesta de menú navideño que incluye antipasti, primer y segundo plato, postres, pan y bebida.