Ahora suena más el himno de la décima, el ‘¡Hala Madrid!… y nada más’ que escribió gallego Jabois, pero los más clásicos recordarán el de toda la vida, ese que habla de un “club castizo y generoso” que “cuando cuando pierde da la mano sin envidias ni rencores, como bueno y fiel hermano”. Tras la ‘perrencha’ acontecida tras enterarse por anticipado de que era Rodri y no Vinicius, el ganador del Balón de Oro, se podría decir que el Madrid ha traicionado no solo su historia y su escudo, sino también su himno.