No fue la de Medellín la prueba de la Copa del Mundo a la que Miguel Alvariño llegó en mejores condiciones esta temporada. Pero la tercera posición en la que acabó en el cuadro individual de recurvo confirma el salto de calidad que ha dado. “Hasta cuando no estoy fino lo hago bien”, destacó el arquero tras una jornada final en la que perdió en semifinales con el italiano Mauro Nespoli (7-1) y se impuso en la lucha por el bronce al estadounidense Jack Williams (6-4). Este bronce se une a la plata conseguida en la competición por equipos.

“Seguimos en la pomada”, indicó el deportista somocense tras subir al podio de una de las cuatro pruebas de la Copa del Mundo por tercera vez en lo que va de temporada, –algo que no ha conseguido ningún otro en lo que va de campaña y que le hace ser segundo del torneo–. Eso lo lleva a estar cómodamente instalado en el número 2 del ranking mundial, por detrás del líder –el surcoreanao Woojin Kim, que se hizo con el título en Colombia– y esperar tranquilamente a la Gran Final de la Copa del Mundo, que se celebrará a mediados del mes octubre (en concreto los días 15 y 16) en la localidad mexicana de Tlaxcala de Xicohténcatl.

Trabajo

“Estoy feliz porque estoy trabajando muy bien”, dice el arquero que entrena habitualmente en O Poboado de As Pontes y que esta temporada ha incidido especialmente el aspecto mental y la adaptación a su nuevo arco. Ademas, Alvariño espera que este buen nivel le sirva para clasificarse el año que viene para los Juegos Olímpicos que se van a disputar en 2024 en París –tanto para la prueba individual como la de equipos–. “Sé que si estoy puedo hacer algo unico”, amplía el deportista de Ferrolterra de cara a esa cita.

Por lo de pronto, el arquero hará frente este fin de semana al Campeonato de España que se celebra en Madrid y, a partir de ahí, descansará unas semanas antes de empezar la preparación de la Gran Final de la Copa del Mundo. Será la oportunidad de volver a conseguir un título que ya logró hace unos años y que confirma la regularidad que ha tenido a lo largo de esta temporada, la de su explosión definitiva. l