Después de tres semanas que se han hecho eternas, el As Pontes ya puede decir que se mantiene un año más en Preferente. El equipo dirigido desde enero por Pepe Mariño consiguió eludir las cuatro últimas plazas del grupo norte, pero los arrastres de categorías superiores habían amenazado su continuidad en la categoría.
Aunque a última hora de la tarde de hoy lunes la decisión no había sido comunicada al club, la incertidumbre llegó a su fin con la resolución de la Real Federación Española de Fútbol que otorga a Viveiro y Arzúa las dos plazas vacantes tras la ampliación de Tercera División, que pasa a tener nuevamente 18 equipos, por los 16 de la campaña pasada.
En el dictamen del Juez Único de Competiciones no Profesionales, Rafael Alonso, se explica que esta cobertura tiene como primer argumento el mérito deportivo. En este caso, los descendidos fueron cuatro, uno –el decimotercero de Tercera División, el Viveiro– por el efecto arrastre, y los otros tres –Arzúa, Barco y Choco– por ocupar una de las tres plazas ordinarias de descenso. Tanto Viveiro como Arzúa manifestaron, a través del proceso abierto por la Federación Española, su interés en obtener una de esas plazas que, atendiendo a la clasificación de la temporada pasada, les corresponde. Ambos clubes tienen que formalizar su inscripción antes del 17 de julio.
Esta resolución –que se puede recurrir hasta el miércoles a medianoche– conlleva que el As Pontes pueda celebrar ya su permanencia y comenzar a planificar la próxima temporada sabiendo, tres semanas después de finalizar la campaña 2022/2023, en qué categoría.