O Parrulo se despidió esta noche del ascenso a Primera División tras perder por la mínima ante el Family Cash Alzira en el encuentro definitivo de las semifinales del playoff. El resultado fue un castigo excesivo para un equipo, el ferrolano, que dio su máximo en una A Malata hasta la bandera, pero que acabó pagando con la eliminación su falta de efectividad en la primera parte.
Nada tuvo que ver el guion del tercer partido con el de hace diez días en el mismo escenario. Podría decirse, incluso, que fue la antítesis, pues la escuadra de Correal tuvo las primeras ocasiones, sobre todo en las botas de Sena, que obligó hasta en tres ocasiones a Coro a emplearse a fondo para sacar sendos mano a mano.
Los ferrolanos, por su parte, también golpearon en varias ocasiones, con Adri, Orzáez y Novoa exigiendo a Porky. Marrube optó, como en ocasiones anteriores, por sacar el portero-jugador para embotellar a su rival, que, a diferencia del primer partido, tuvo muchísimas dificultades para desplegar su juego vertical y buscar el pase largo que tanto daño hizo entonces.
Los primeros minutos permitieron ver, por lo tanto, a dos equipos que buscaron el gol con insistencia. La ocasión más clara sería, de nuevo, del capitán “parrulo”, que remató al palo desde la frontal un balón suelto que había generado Wilson Francia con un gran reverso.
Tras ese frenesí llegaron unos minutos que se jugaron más en el centro de la cancha. Las oportunidades claras se esfumaron en una especie de alto el fuego controlado. Fueron solo cinco minutos. El choque despertó con ocasiones de Sena para los visitantes y Kevin, Orzáez y Novoa para los locales. El técnico visitante tuvo que pedir tiempo para realizar un par de ajustes, pero lo cierto es que, salvo dos llegadas relativamente claras de Rubi –en una acción de estrategia– y Sena –a pase de Peiró–, O Parrulo volvió a imponerse con una serie de ocasiones –hasta cinco muy claras– que no llegó a materializar. Estuvo muy cerca en dos de ellas, sendas contras, ambas en superioridad, que Kevin no acertó a introducir en la meta defendida por Porky. Por si fuera poco, en la última acción de la primera parte Orzáez estrelló un balón en el larguero. Increíblemente, el partido llegaba sin goles al descanso.
El escenario cambió en la reanudación. El Alzira se mostró más entero –y superior físicamente, pues tiene una rotación más amplia– en el tramo decisivo y O Parrulo comenzó a ver la portería defendida en la segunda parte por Serra demasiado pequeña. No dejó de intentarlo de todas las maneras posibles. Recurrió más al juego de cinco, pero las ocasiones ya no fueron tan claras como en la primera parte.
El equipo valenciano, por su parte, supo mantener el orden defensivo y apenas cometió errores. Además, en su ocasión más clara, se adelantó. Era el minuto 33 cuando Sena condujo un balón que había robado –en la acción previa el banquillo local reclamó falta a Iván Rumbo–, aguantó la marca de su par y acabó batiendo a Coro con un derechazo cruzado.
A Malata enmudeció, pero solo un momento. Muy pronto volvió a espolear a los suyos, que llegaron de inmediato a la quinta falta. Adri tuvo la primera gran ocasión para igualar el choque, pero en su disparo se interpuso Kevin en línea de gol. La segunda fue un tiro de Wilson –cuando era portero-jugador– que pegó en el palo. Quedaban menos de dos minutos que se acabaron jugando en su totalidad en el área de un Alzira que supo defenderse y ganar por segunda vez en diez días en A Malata para citarse con el Burela en la gran final por el ascenso a la máxima categoría del fútbol sala español.
Ficha técnica:
O Parrulo: Coro, Adri, Rubén Orzáez, Iván Rumbo y Hélder –equipo titular–; Novoa, Charly, Kevin Chis, Wilson Francia y Keita.
Family Cash Alzira: Porky, Castejón, Peiró, Carlitos, Javi Sena –equipo titular–; Joan, Rubi, Carlitos, Pedro, Serra (portero), Gabri Pastor y Naranjo.
Gol: 0-1, min. 33: Sena.
Árbitros: Kepa Díez y Xabier Huarte, del comité vasco. Amonestaron a los locales Adri y Kevin Chis y al visitante Peiró.