16º-21º
domingo | 21 julio | 2024
Con las lágrimas a flor de piel y respaldado por una plantilla representada por sus otros dos capitanes, Álex López y David Castro, Fernando Pumar (Ourense, 1989), acompañado por el director deportivo, Carlos Mouriz, detallaron el final de la vida activa en el Racing del futbolista, que deja de tener ficha federativa aunque seguirá entrenando con el grupo hasta el final de la temporada. “Tomo las decisiones que tengo que tomar, independientemente de que sean más o menos agradables”, reconoció Mouriz, que añadió que “sé lo que él siente y necesito darle las gracias por el tiempo que ha estado con nosotros, lo que se ha esforzado y el compromiso que hace en el día a día para que seamos mejores”, amplió.
Mouriz, que describió a Pumar como “un compañero de viaje único, que le ha dado al club más alegrías que en lo deportivo”, adelantó su intención de seguir contando con él en el futuro porque “lo necesitamos en este proyecto, porque su importancia como valor del club es innegociable”. De hecho explicó que, tras comunicarle que no iba a tener ficha de cara a la segunda parte de la temporada, su actitud fue un ejemplo de lo que es como persona: “Ni una pega, ni una queja, ni una mala cara, ni un mal gesto... solo sumar”, dijo.
Mientras, Pumar explicó cómo se llegó a esta situación y recordó cómo ha sido su experiencia en el club verde.
Recuperado de la lesión de rodilla que sufrió la campaña anterior, Pumar trabajó desde pretemporada para entrar en la dinámica del equipo y ganarse sus primeros minutos en Segunda. Sin embargo, las continuas molestias sufridas le impidieron llegar a debutar y lo llevaron a una situación en la que reconoce que “voy más por la ilusión y las ganas de debutar y sumar que porque fisicamente esté bien. No puedo ir al cien por cien y esta es una categoría muy exigente... pero me voy tranquilo conmigio mismo con lo que hecho”. De todas maneras, el futbolista ourensano explica que “puedo seguir aportando fuera de lo que es el terreno de juego”.
“El Racing ha sido mi vida: aquí me hice futbolista, salí, volví y ahora me despido”, recuerda el lateral ourensano de un club en la que ha estado dos etapas (la segunda la de mayores éxitos). En él coincidió con muchos jugadores de los que guarda un enorme recuerdo –además de los presentes Álex López y David Castro nombró a Heber Pena, porque “es con el que más he compartido vestuario” y recordó a Diego Rivas, Quique Fornos, Dani Rodríguez, Pablo Rey, Marcos Álcarez, Iago Iglesias, Manu Barreiro...–. “Son ocho campañas aquí”, dice.
“El ascenso de la temporada pasada fue el culmen”, destaca Pumar como su mejor momento en el Racing. A pesar de no estar en el terreno de juego por la lesión de rodilla que había sufrido meses antes, el futbolista lo recuerda como “un momento de alegría máxima”. De hecho, desvela que poco antes de que terminase el partido contra el Celta B, que vio junto al también lesionado Joselu, “nos abrazamos, lloramos por lo conseguido... Es algo que me llevo para siempre”.
¿Es posible acabar viendo al Racing en Primera? “Por supuesto, para ello trabajamos. No sé si será a corto o medio plazo, pero esa ambición es la que tiene que movernos: trabajar para ser mejores, tanto jugadores como club y ciudad”, explica el futbolista. Sería la manera de culminar la evolución que está experimentando un club que Pumar reconoce que ha cambiado... “y tenemos que seguir creciendo: no es solo que se quiera jugar en Primera, es que para eso hay muchas cosas detrás y el club tiene que seguir progresando”.
Si algo caracteriza a este Racing es que no vislumbra el techo al que puede llegar. “Por eso estamos en los puestos en los que estamos: el equipo compite muy bien y todas las semanas pone en dificultades a los rivales para que se lleven puntos”, destaca Pumar. Es la dinámica en la que espera que siga el cuadro verde, “partiendo de la humildad y los pies en el suelo para que la liga determine en qué puesto quedamos”.
“Es que esta gente, con estos valores y compromiso, es la que hace que el Racing esté como está”, cree Mouriz.
