A pesar de no comenzar demasiado bien su camino por el pasado mes de octubre –sólo pudo disputar seis minutos en el primer choque de éste, ante un Espanyol que terminó ganando 3-0– el local Heber Pena supo aprovechar a la per­fección los 291 restantes a los que finalmente hizo frente en los otros cinco partidos dirimidos el pasado mes.

Unas cifras en las que Pena anotó dos de los cuatro tantos con los que cuenta hasta la fecha –uno ante el Eldense y dos ante el Racing de Santander–, además de una asistencia a su compañero Carlos Vicente, precisamente en este último duelo. Unas cifras que, sin duda, junto con el orgullo con el viste y habla de su formación, llevan a que la afición racinguista lo eligiese como Jugador Estrella Galicia, con casi el 68 por ciento de los votos. “Gracias por seguir dándome su apoyo y ojalá que éste no sea el último”, señaló el extremo al recibir su galardón como el más valorado de la plantilla racinguista el pasado mes.

Confianza

El futbolista naronés señaló su buen nivel, sus “buenas sensaciones” y su buen momento, especialmente “en lo que a goles se refiere y en cuanto a asistencias, igual otros años estuve mejor”.

Un buen momento que, junto con el del resto del grupo hace que el Racing cuente ya con la mitad de los puntos, en principio, necesarios para mantener su plaza en la categoría. Si bien, el naronés sólo quiere mirar hacia delante. “Lo que hicimos ya pasó, todo muy bonito, pero si ahora perdemos cuatro partidos ya estás mirando los números y echando cuentas”, sentencia el extremo izquierdo, “tenemos que ir partido a partido y esta semana toca Burgos. El objetivo del club es ese y el que nos pusimos nosotros de ir semana a semana, sin pensar en un futuro muy lejano . Creo que esa es la clave de este equipo”.

Una hoja de ruta basada en el trabajo y en la confianza en éste, y que asimismo el naronés visualizó para sí mismo esta campaña, iniciando lo que sería uno de sus mejores momentos deportivos con el gol ante el Sporting. “Yo siempre tuve confianza en mí. Sabía que este año quizás al principio iba a ser difícil, porque venía gente importante, pero sabía que desde el trabajo y la humildad y confiando en mis capacidades... estoy teniendo la fortuna de ayudar al equipo dentro y fuera del campo”, sentencia Pena, que reconoce que el ser uno de los jugadores de la casa es “un orgullo y una responsabilidad. Vine de la mano de Carlos para llevar al equipo a Segunda y puedo seguir ayudando a que el equipo crezca. Es un honor ser parte de esto”.

Un trabajo que no pasa ­desapercibido fuera de A Malata y que, si bien el runrún principal apunta a Carlos Vicente como plato principal en el interés de clubes de Primera, Pena es asimismo otra elección muy apetecible en esta carta. Un tema que el naronés cierra con “el futbol dirá”, si se queda o se va, “estoy contento aquí. Ahora lo importante es el Burgos”.