Antón Corujo Bouza, el joven jugador del Aldebarán San Sadurniño que falleció el pasado viernes 10, será incinerado hoy en la más estricta intimidad familiar en el Tanatorio Crematorio Albia Ferrol, agradeciendo la familia las condolencias recibidas. El féretro del deportista, de 16 años, llegó ayer a estas instalaciones tras la realización de la correspondiente autopsia, de cara a conocer los motivos del repentino fallecimiento del voleibolista cadete.
Los hechos se produjeron en la mañana del viernes, cuando Antón y sus compañeros se encontraban disfrutando de la piscina del hotel en el que se alojaban, con motivo de la disputa del Campeonato de España en Benicàssim, Castellón, y para el que se habían clasificado tras una gran campaña, logrando la tercera posición en la fase final gallega.
Esta tragedia ha conmocionado tanto al club de San Sadurniño, en el que el jugador formaba desde hacía dos campañas, como al propio concello y a toda la comarca, especialmente en Neda, donde residía el jugador y su familia. La Real Federación Española de voleibol decretó un minuto de silencio en todos sus duelos del fin de semana y la Gallega suspendió toda su actividad como forma de duelo.