Cuatro victorias seguidas en las últimas jornadas del campeonato liguero del grupo 2 hacen que el Nàstic esté en el playoff de ascenso a Segunda. Parecía imposible que llegase a esa zona tras la derrota sufrida ante el Sabadell (2-0) en la trigésimo cuarta jornada, que lo dejó en la undécima posición –aunque en realidad a solo dos puntos de las plazas deseadas–, pero el arreón final del equipo tarraconense –incluidas victorias como la conseguida en el campo de un Albacete que se estaba jugando el título– lo hizo posible.

Se presentará el Nàstic a la fase de ascenso después de ser cuarto en el grupo 2 gracias a los 61 puntos que sumó, fruto de 16 victorias, 13 empates y 9 derrotas. Sus registros goleadores, además, hablan de que marcó 41 tantos en las 38 jornadas del campeonato y solo encajó 30 –el que menos recibió de toda su competición–. Así que su nivel defensivo es, a primera vista, su principal virtud en la lucha por dar el salto a la categoría de plata.

Amplitud

A caballo entre la categoría de plata y la de bronce en las últimas temporadas, el proyecto dirigido por Raúl Agné empezó la temporada con la intención de luchar por ascenso o, al menos, meterse en el playoff. De hecho, aunque en las primeras jornadas estuvo en varias entre los cinco primeros, en el tramo central del campeonato llegó a ver a siete puntos la zona que clasificaba para la promoción, lo que parecía complicar unas opciones que recuperó en el tramo final de la liga regular.

A ello ayudó la veteranía de un grupo formado por jugadores con experiencia en categorías superiores, que son los que han mantenido al equipo en los peores momentos. Ahora, en una fase de ascenso a Segunda como esta, están llamados a jugar un papel importante para que el cuadro grana consiga su objetivo.