No hay quien tosa a O Parrulo en A Malata. Logró el equipo ferrolano su tercera victoria en otros tantos partidos jugados como local y eso le permite asentarse en la zona media-alta de la clasificación. El triunfo llegó ante uno de los rivales más duros que hay en la categoría, lo que confirma que el cuadro de la ciudad naval dispone de recursos como para complicar a cualquiera.
Disfrutó O Parrulo de las primeras ocasiones del partido ante un rival que apostó por la agresividad como manera de hacerle daño al rival. El dominio del equipo local, sin embargo, no llegó a reflejarse en el marcador hasta mediado el primer acto, cuando Wilson Francia y Kevin Chis marcaron de manera consecutiva para allanar el camino al triunfo.
Optó a partir de ahí el cuadro zamorano por el juego de cinco como manera de buscar la portería contraria, aunque en realidad casi ni fue capaz de crear peligro sobre la portería rival. Solo en último minuto de la primera parte una falta cerca del área local permitió al cuadro visitante meterse en el partido con un gol en una jugada de estrategia. Sin embargo, el tanto marcado por Adri a los pocos segundos dejó las cosas como estaban de cara a a segunda parte del duelo.
Mantuvo O Parrulo el partido controlado ante un rival al que su agresividad no solo no lo ayudaba, sino que lo ponía en problemas por la cantidad de faltas acumuladas y también por las tarjetas amarillas recibidas. Así que, en vista de que el partido no ofrecía demasiadas novedades, el cuadro visitante optó por el juego de cinco, pero su primera superioridad finalizó con una pérdida que Orzáez, a puerta vacía, aprovechó.
No tardó demasiado en reducir distancias el Atlético Benavente jugando con portero-jugador, pero O Parrulo mantuvo el partido bajo control y hasta dispuso de una superioridad numérica que se tradujo en el quinto gol a los pocos segundos de que los jugadores sobre la cancha se igualasen. Fue el tanto que dio carpetazo a lucha por el resultado a pesar de los intentos de la escuadra vistante por marcar.