Empresas como Amazon, AstraZeneca, Google, YouTube, Pinterest o MacLaren son parte de las cincuenta compañías que se han empeñado en sentar bien a sus empleados, un signo que denota, según los expertos, lograr una oficina más saludable, más sostenible y más cómoda.

Cincuenta espacios de trabajo, proyectados por profesionales de primer nivel forman parte del libro "Trabajar bien sentado: Good design is good business" (Ed. Lunwerg), promovido por la empresa Andreu World, Premio Nacional de Diseño 2007, especializada en mobiliario, con la que han trabajado diseñadores y arquitectos de prestigio como Patricia Urquiola o Philippe Starck.

"La pandemia ha provocado una transformación de las oficinas, acelerada por las nuevas tecnologías", advierte Jesús Llinares, CEO de Andreu World, quien apunta que ahora las casas sirven para trabajar y las oficinas se han vuelto más domésticas, un proceso en el que el diseño se ha convertido en una de las herramientas esenciales de este cambio.

"Porque cuando están bien diseñados los espacios pueden sacar lo mejor de cada uno de nosotros", incide el arquitecto Víctor Feingold, presidente de Contract Workplaces, una empresa presente en doce países latinoamericanos y cuyo objetivo es "humanizar los espacios de trabajo" para potenciar el talento y la productividad.

Diseñadores de interiores y arquitectos coinciden en que la sostenibilidad, la salud, el trabajo flexible y la interrelación social son las claves de la nueva oficina: más sostenible, más saludable y también más confortable.

"Se está produciendo un renacimiento en la arquitectura laboral y en el diseño de lugares para trabajar, que pone a las personas en el centro", rodeadas de plantas y naturaleza, en algunos casos, según indican en el prólogo del libro el arquitecto Ramón Úbeda y el consultor Álvaro Castro.

Un estudio de Human Space, realizado en 16 países, ha demostrado que el diseño bofílitico aumenta un 15 por ciento la creatividad de los trabajadores y un 6 por ciento su productividad.

En la sede de Pinterest en San Francisco (Estados Unidos) optaron por una arquitectura simple e intuitiva, un proyecto ejecutado por IwamotoScott que aprovecha el espacio al máximo, con espacios con mucha luz natural donde las zonas comunes permiten la interacción de los empleados.

Áreas que se combinan con espacios de trabajo y salas de reuniones organizadas como un mosaico de espacios abiertos y cerrados.

"Las oficinas requieren modificaciones en el diseño del espacio de trabajo, aunque sobrevivirá como el corazón de la empresa", aunque el teletrabajo haya llegado para quedarse, afirma Feingold.

El especialista hace hincapié en que hacer un mejor uso del espacio a través de la mejor ubicación del equipamiento tiene una gran influencia en sus ocupantes así como integrar la tecnología son aspectos esenciales para garantizar un buen trabajo.