La ejecutiva regional y los ochos secretarios provinciales del PSOE-A han cerrado este lunes filas en torno a su candidato y secretario general, Juan Espadas, tras la histórica derrota en las elecciones andaluzas y han acordado "resetear" al partido y analizar con "autocrítica y en profundidad" los motivos del fracaso.
Arropado por parte de la Ejecutiva regional y por distintos secretarios provinciales, el candidato ha comparecido ante los medios para asegurar sin rodeos que su partido ha obtenido un "mal resultado" y que ha fracasado en su intento de movilizar el voto progresista que, en opinión, se ha quedado en casa y ha hecho que aumente la abstención.
El PSOE-A ha conseguido 30 diputados, tres menos que en el 2018, y el peor resultado de este partido que por primera vez ha perdido unas elecciones, una derrota histórica que la dirección socialista quiere analizar en profundidad en cada territorio, reflexión y análisis que Espadas no ha acotado en el tiempo.
"Estoy más fuerte que nunca porque me crezco ante las adversidades y admito que tras conocer los resultados he dormido más tranquilo sabiendo que Vox no estará en el Gobierno andaluz", ha manifestado.
El dirigente socialista ha defendido la campaña que ha desarrollado frente a la campaña "plana" de Juanma Moreno, del que ha dicho que ha puesto todo de su parte para "no haya" una alta participación, aunque ha reconocido que su partido "no ha sido capaz" de movilizar al electorado progresista.
"Tenemos que ser autocríticos y estudiar en profundidad lo que ha fallado para conocer por qué se han ido los votos progresistas a la abstención", ha subrayado Espadas, que ha utilizado el mismo argumento que empleó Susana Díaz en el 2018 para explicar la derrota.
Sobre la constante presencia y apoyo de la dirección federal, de los ministros y de Pedro Sánchez en la campaña, ha sostenido que han sido elecciones autonómicas, en "clave" andaluza, por lo que ha rechazado que los resultados tengan una lectura nacional.
De hecho, ha comentado que es "lógico" el apoyo que ha recibido del Gobierno y de la dirección federal, lo que ha justificado en la idea de que la política de Pedro Sánchez "beneficia" a los andaluces.
"Sánchez está sufriendo una operación de acoso y derribo y esta estrategia ha podido calar entre los votantes andaluces", ha considerado.
Los socialistas andaluces se disponen ahora a "resetear" al partido, a buscar los fallos de estrategia cometidos durante la campaña electoral andaluza ya con vista a las elecciones municipales de mayo del próximo año.
Espadas ha subrayado, en este sentido, que su partido estará en "condiciones" de afrontar los comicios locales de recuperar la confianza de los andaluces y de "llenar" los ayuntamientos de la comunidad de alcaldes socialistas.
Además, se ha mostrado convencido de que su partido volverá al Gobierno de Andalucía en las próximas elecciones "sin mirar atrás".
Espadas se queda al frente del partido y será el "jefe de la oposición" en el Parlamento de Andalucía, donde quiere formar un "gobierno a la sombra" para llevar a cabo una oposición "exigente, contundente y eficáz" que sea el "espejo en el se mire" el próximo gobierno de Moreno.
"Cuando el PP gobierna en mayoría absoluta es mucho más derechas", ha advertido el dirigente socialistas, que ha recordado que este partido ha sido capaz de capitalizar el voto de centro, tal y como ha ocurrido en Madrid y Castilla y León, ha precisado.