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viernes | 18 octubre | 2024
A día de hoy, se desconoce el número exacto de colonias felinas existentes en el término municipal de Ferrol, pero mientras el Concello continúa realizando labores de mapeo de estas poblaciones, desde el refugio de mascotas de Mougá se estima un mínimo de 80 a lo largo de todo el territorio. Tal y como establece la Lei galega de protección e benestar dos animais de compañía, de octubre de 2017, las labores de vigilancia y control sanitario de las mismas es competencia municipal.
Sin embargo, al no contar con recursos adicionales para poder realizar los trabajos, el gobierno local tuvo que depender de la buena voluntad de sus vecinos para alimentar, cuidar y esterilizar estos felinos. Afortunadamente, en 2021 la Mancomunidade de Concellos da Comarca de Ferrol acordó desarrollar un programa de Captura, Esterilización y Retorno (CER) de estos animales con una dotación presupuestaria adecuada. Así, esta iniciativa se puso en marcha al año siguiente, teniendo al mencionado refugio como eje central –atiende a más de un millar de estos animales al año– y valiéndose de los voluntarios para desarrollar las labores.
Tras un exitoso primer ejercicio, en el que participaron 15 personas, el gobierno local constató el interés de los ferrolanos para colaborar en el cuidado de los felinos, abriendo así en el presente ejercicio un nuevo período para que más personas se registrasen como colaboradores del programa y darles así cobertura con un seguro de responsabilidad civil. De este modo, el Boletín Oficial de la Provincia publicó esta semana la relación de los voluntarios para este año, constatando el incremento de la cifra de colaboradores hasta los 60.
“El pasado 2 de julio firmamos el decreto con el listado definitivo de las personas que están incluidas en la relación de voluntarios que atienden a las colonias felinas repartidas por todo el concello de Ferrol”, detalló ayer la edil responsable de Benestar Animal, Maica García, recordando que el pasado mes de abril se celebró en el Antiguo Hospicio un encuentro con este grupo de colaboradores. “Con esta lista se elaboró el mencionado decreto, donde se establece que cada persona atiende a una colonia”, explicó –aunque en algunos casos estos vecinos se pueden hacer cargo de más de una–.
De este modo, el programa establece que los voluntarios, al detectar nuevos animales, deben alertar al refugio, que se encarga de recoger a los gatos, desparasitarlos y tratar posibles lesiones y enfermedades y, posteriormente, esterilizarlos y devolverlos a la colonia. “Todas ellas están bajo el paraguas del Concello de Ferrol y están aseguradas en caso de posibles rasguños o cualquier incidente mientras realizan estas labores”, apunta García, incidiendo en que este decreto es importante de cara a evitar que otros vecinos “increparan” a estas personas, dado que la normativa municipal prohíbe alimentar a animales callejeros.
Asimismo, la responsable de Benestar Animal aprovechó la ocasión para volver a agradecer a las y los voluntarios –en su gran mayoría son mujeres– su colaboración con el gobierno local, subrayando que ellas mismas sufragan de su propio bolsillo los cuidados de los animales, adquiriendo la comida e incluso, cuando el programa no estaba activo, haciéndose cargo de la esterilización de los felinos.
Por su parte, la responsable del refugio de animales de Mougá, Yadira Tenreiro, explicó que en estas instalaciones se lleva a cabo el programa CER desde el año 2022, atendiendo, en el conjunto de los nueve municipios que componen la Mancomunidade, más de un millar de animales al año. “Se hacen actuaciones sobre los gatos enfermos, heridos leves y graves y también castraciones con desparasitaciones e incluso vacunas”, detalla Tenreiro. En este sentido, la responsable explica que cada concello cuenta con sus propios requisitos y que en el caso de Ferrol se realiza mediante la mencionada lista de voluntarias autorizadas.
Respecto al número de colonias existentes en este territorio, Yadira Tenreiro apunta a que no se sabe con seguridad la cifra, dado que “es una labor bastante complicada, porque aún hay mucha reticencia a la hora de darse de alta por miedo a las multas por la alimentación de animales en la calle”. “Es una cifra complicada, nosotros atendemos a más de mil gatos al año y sin embargo no hemos llegado a notarlo como tal”, lamenta. De esta forma, la responsable del centro ferrolano explica que el objetivo de la iniciativa es la reducción de dichas poblaciones, entre otros motivos, por los problemas sanitarios que pueden ocasionar –poniendo como ejemplo colonias detectadas en el entorno de hospitales y residencias de mayores, con gente inmunodeprimida–.
Si bien este decreto ofrece una protección adicional a las y los voluntarios, esto no quiere decir que no presente carencias, como apunta Guadalupe Ces, una de estas colaboradoras.
“Faltarían moitísimas cousas e recursos para que Ferrol se distinguira no coidado e respeto desas colonias”, apunta esta vecina de Caranza, explicando que la iniciativa comenzó durante el mandato anterior y que en el presente se le está dando continuidad. Así, la voluntaria señala que no se trata de tener que pagar estos cuidados a título personal, sino que en otras ciudades, por ejemplo, se dispone de casetas de protección para estas colonias de animales urbanos.
