Desde primera hora de la mañana el acceso del tráfico rodado al barrio de Ultramar desde la rotonda del Diapasón quedó cortado y así permanecerá, según las previsiones del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana hasta que se concluya la obra de humanización de As Pías.
Pese a que esta vez sí se cumplieron las previsiones –el inicio del corte de la Trinchera y la puesta en funcionamiento del desvío provisional no respondió al aviso que se había dado en su día previamente–, y el cierre al tráfico se había anunciado con antelación, muchos fueron los conductores que se encontraron con la eliminación de este acceso de forma repentina y, además, abrupta, ya que no era hasta el momento de llegar justo a la zona de acceso cuando se enteraban de que por el paso del puente azul no se podía circular.
La zona de la rotonda del Diapasón, que ya es un núcleo de colas especialmente en horas punta como la salida de Navantia o de los centros educativos se hizo hoy todavía más intransitable en momentos concretos del día.
El Concello ha mostrado su disposición de colaboración a la Demarcación de Carreteras para acelerar estas obras y también para que se tengan en cuenta algunas apreciaciones efectuadas desde el gobierno local y que se proponen con el fin de evitar este aislamiento de parte del barrio de Ultramar.
De este modo, el alcalde, José Manuel Rey, explicó que ha reclamado la construcción de un bypass en la calle Nueva de Caranza como el que se ha habilitado en La Trinchera.
Así, indicó que “desde que estamos no goberno iniciamos conversas con Carreteras del Estado, que ten a responsabilidade da actuación e froito diso houbo unha reunión, polo que agradezo a disposición, pero na que tamén espuxemos algunhas melloras como a construcción dun bypass na rúa Nova de Caranza, para o que se mostrou boa disposición e haberá que esperar a resposta”.
El alcalde llama la atención sobre el hecho de que se baraje un año de cierre, hasta el final de la obra, por lo que habría un aislamiento de la zona, que, asimismo, recibe una amplia densidad de tráfico.
Además de la mejora que supondría un nuevo bypass, el Concello apuntó otras como la ampliación del ámbito de actuación hasta la carretera de Castilla, ya que la obra de As Pías solo se contemplaba hasta Porta Nova o una nueva rotonda en la calle Nueva de Caranza.
Rey Varela recordó que las obras no están ejecutadas ni al 20%, por lo que hay importantes retrasos. Su finalización estaba prevista inicialmente para finales de 2024, aunque, al tratarse de fondos Next Generation, es 2025 la fecha tope para la justificación y conclusión de la obra.
De todos modos, reiteró su apuesta por la “coordinación entre administracións” y en esta línea mañana martes Javier Díaz, que ejercerá como alcalde en funciones, y la edil de Urbanismo, Blanca García, visitarán las obras para analizar el desarrollo de las mismas junto al delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, y la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas.
Precisamente con el fin de cumplir los plazos y no perder fondos, el alcalde recordó que se están acelerando otras obras en la ciudad como la de la Iglesia y la de San Francisco, que visitó este mismo fin de semana, recordando así que “os sábados se está a traballar nas obras con retraso”.
Para esta misma semana está prevista la apertura al tráfico del primer tramo de la calle San Francisco, desde la Praza Vella hasta su cruce con la calle San Antonio. La actuación está casi finalizada, solo pendiente de algunos detalles.
El cierre al tráfico de la calle Nueva de Caranza en el tramo entre Santa Comba y la glorieta del Diapasón –Uxío Novoneyra– implica que los vehículos deben acceder por uno de los dos itinerarios ofertados: uno por la Trinchera, Nicasio Pérez y carretera de Castilla; y otro por avenida de Esteiro, calle Ricardo Carvalho Calero y carretera de Castilla.
En cuanto al servicio de transporte público, la única línea afectada es la C, que varía su recorrido entre el barrio de Caranza y Praza Vella, en ambos sentidos (Euskadi, avenida de Esteiro y Telleiras, hacia Caranza; y Telleiras, avenida de Esteiro y Carvalho Calero, hacia Praza Vella). El resto del trayecto se lleva a cabo por el itinerario habitual y se mantendrá, además, hasta el fin de los trabajos.