La Cruz Roja de Ferrol traslada su sede desde el histórico edificio modernista del número 26 de la calle del Sol hasta un bajo en Dolores, esquina con Coruña, donde antiguamente se ubicaba Cajamadrid (más recientemente, Clarel). Se trata de un espacio más amplio y funcional, que responde, explican fuentes de la entidad, a unas necesidades crecientes, ya que en los últimos tiempos venía aumentando su actividad, su equipo técnico y el número de voluntarios. El local actual se había quedado pequeño y, además, su especial protección patrimonial impedía que se llevasen a cabo obras en su interior.
El grueso de la mudanza se realizó ayer y continuará durante el día de hoy, cuando esperan poder abrir al público con normalidad, aunque en estos días no han dejado de prestar sus servicios. Mantienen el mismo número de teléfono y demás datos.
Hace años, antes de la pandemia de coronavirus, que la Cruz Roja buscaba una nueva ubicación que pudiera dar cabida a sus necesidades, estudiando diversas opciones, entre ellas la permuta por otro edificio de propiedad municipal, como es el caso del número 26 de la calle del Sol, adquirido por el Ayuntamiento y cedido a la entidad en 1972. De momento se ha optado por alquilar este bajo con fondos propios.
Cruz Roja se despide de uno de los edificios modernistas más emblemáticos de la ciudad, uno de los primeros que se levantaron, obra del arquitecto asturiano Julio Galán Carvajal. Nació como un dispensario antituberculosos a principios del siglo XX (se construyó entre 1908 y 1911), en un momento de gran incidencia de la enfermedad.
El inmueble fusiona esquemas utilizados para las instalaciones sanitarias de la época con aportaciones modernistas. Posee una distribución central en planta, con elevación de un cuerpo para la iluminación natural de la sala de espera y también como medida higiénica. Está rodeado de un muro de mampostería con un enrejado de hierro en punta de lanza. Uno de sus elementos más llamativos son las cornisas con pináculos y la decoración de las fachadas. También destaca la redondez de las esquinas.