Ni las advertencias previas de que la ciudad se quedaría sin fondos del Edusi para proyectos como el de la carretera de Castilla ni las peticiones más moderadas al PP y al BNG de que, al menos, se abstuviesen para poder sacar adelante el Plan de Mobilidade Urbana Sostible –PMUS– sirvieron para que estas dos formaciones apoyasen la propuesta del plan de movilidad, con la que el PSOE solo contó con el apoyo de Ferrol en Común.
 

Todos los grupos de la oposición insistieron en que no se han tenido en cuenta las aportaciones planteadas y, por diferentes formas de concebir la movilidad en la ciudad, PP y BNG acabaron aliados y evitaron que saliese adelante este plan, con el que la ciudad debe contar si se quieren optar a determinadas ayudas europeas.
 

El concejal de Urbanismo, Julián Reina, insistió en que es un “documento vivo” con el fin de contar con apoyos y poder realizar modificaciones en un futuro, pero no fue suficiente, ya que el BNG rechaza tajantemente que se postergue la peatonalización durante seis años, entre otras cuestiones, y el PP critica la deriva de eliminación de aparcamientos sin medidas alternativas que, a su juicio, sigue el ejecutivo. 
 

El resultado es que no hay PMUS por el momento y que se van a perder 1,6 millones de euros del Feder. El gobierno culpa al Partido Popular de esto –FeC apoyó el plan mientras que el BNG, pese a las diferencias, se abstuvo en la votación y el Partido Popular propició el rechazo final a la propuesta– mientras que su portavoz adjunto, Javier Díaz, asegura que comienza “la victimización” del gobierno, cuando ha tenido tiempo de buscar consenso. Tacha al ejecutivo de Ángel Mato de tener interés no en el plan, sino en empezar otra obra electoralista.

Sin apoyos la rebaja en el precio de las plazas de aparcamiento en el parking de la plaza del Carbón

La propuesta del gobierno local de modificación de la ordenanza reguladora de los precios del estacionamiento subterráneo de la plaza del Carbón con el fin de que se pudiesen ofertar a los usuarios de los barrios de A Magdalena y Ferrol Vello plazas de 24 horas por 39 euros no salió adelante y no contó, de hecho, con el apoyo de ningún grupo. 
 

Pese a que la edila Maite Deus explicó que hay interés ciudadano por estas plazas y que incluso existe mayor demanda que oferta, por lo que se establecerían una bases para poder optar a ellas, ningún grupo apostó por esta fórmula, criticando distintos aspectos.
 

Desde el PP se considera que no se pueden suprimir plazas libres en superficie y sustituirlas por otras de pago, recordando que en las obras de Irmandiños, el PP ofreció plazas gratuitas en los parkings del mercado. 
 

Por su parte, FeC rechazó que se propusiese una medida sin negociación previa y se apostó por una progresividad a la hora de establecer los precios, mientras que desde el BNG se apuesta por una peatonalización, no una convivencia del vehículo y el peatón. Así las cosas, la propuesta fue rechazada y el ejecutivo local se encuentra ahora sin la posibilidad de cumplir con el anuncio de esas plazas subterráneas a bajos precios para los afectados por las obras de la calle de la Iglesia y la futura de la calle San Francisco. Desde el partido socialista se considera que este rechazo se basa en “destruir canto máis mellor coa intención de sacar algún rédito electoral, sen importar o dano que se lles faga ás ferrolás e os ferroláns”.
 

El PSOE apunta que la intención del equipo de gobierno era facilitarle a los vecinos de A Magdalena y Ferrol Vello un lugar donde estacionar sus coches a un precio accesible y acusó al líder del PP, Rey Varela, de “antepoñer os seus intereses electorais á cidade, custe o que custe”. 
 

Sin embargo, no fue el PP el único grupo que dejó solo al ejecutivo de Ángel Mato, ya que Ferrol en Común también votó en contra. Por su parte el BNG mantuvo, a juicio del PSOE, una actitud “indolente” que se tradujo en abstención.