El escritor ferrolano Néstor Rodríguez presenta mañana su nueva obra, “El alma en llamas”, una novela de personaje con una fuerte influencia del realismo mágico de García Márquez o Vargas Llosa. El acto se hará en la Central Librera de la calle Dolores a las 12.00 horas.
La necesidad de escribir de Rodríguez es una cualidad inherente a sí mismo. No recuerda cuándo empezó este anhelo, pero tiene claro que “si entras en el mundo de contar historias es porque antes alguien te las contó a ti”. Esta herencia tan peculiar se ha materializado en su primera obra publicada –aunque confiesa que tiene otras tres escritas, pero que son privadas–, un texto que representa una “historia vital”, ambientada en una España imaginaria en el siglo XIX.
En el proceso de creación juegan muchos factores. La forma, que es igual de importante que el contenido, podría ser lo más difícil. “Es un misterio dominar la técnica”, comenta el escritor a sabiendas de que el lenguaje puede ser un gran cómplice y, a su vez, el mayor de los enemigos.
Los personajes, por su parte, son “juguetes”. El autor hace un guiño a la icónica “Toy Story”, donde los protagonistas tienen una autonomía propia y que, dentro de unos límites, escriben su propia historia. Aún así, Rodríguez hace una pequeña confesión y asume que “todos los personajes tienen algo de mí”. Esto se traduce, en el papel, en inquietudes, miedos y objetivos; en síntesis, partes muy sutiles que hacen que él se refleje durante las páginas de su escrito.
Hace memoria y, teniendo en consideración sus manuscritos previos, reconoce que –salvando las distancias– dentro de su escritura, más en concreto en la materia prima de la misma, “siempre se está reescribiendo la misma historia”. Quizá la suya.
Todo esto, junto con algunos detalles que el escritor se ha guardado de cara a su première, ocupará mañana a dicha librería.
En este acto también estarán otros autores que, como Rodríguez, forman parte de El Escritorio, un canal de Youtube dedicado a este arte, en el que confluyen varios creadores.