La diputada de Galicia en Común y dirigente de Izquierda Unida (IU) Yolanda Díaz (Fene, 1971), será la próxima ministra de Trabajo del Gobierno de coalición que liderará Pedro Sánchez, según ha confirmado este jueves La Moncloa.
Licenciada en Derecho por la Universidad de Santiago de Compostela, esta abogada laboralista nacida en una localidad de la ría de Ferrol procede de una familia de históricos sindicalistas y conoce bien la problemática de una comarca marcada por la crisis del naval. Además, es una de las personas más cercanas al líder de Podemos, al que conoce desde hace años.
Díaz lleva ocupando cargos institucionales desde el año 2003, cuando se hizo con un acta de concejala en el Ayuntamiento de Ferrol. Allí fue teniente de alcalde de un gobierno de coalición de PSOE con IU en Ferrol, que duró desde el verano de 2007 hasta octubre de 2008, cuando la coalición se rompió.
En 2005, tras asumir el cargo de coordinadora nacional de Esquerda Unida --la federación de IU en Galicia--, que conservó hasta 2017, fue candidata a la Xunta y repitió en 2009, quedando fuera del Parlamento en ambas ocasiones.
FICHÓ A IGLESIAS COMO ASESOR EN 2012
Díaz sí logró entrar en la cámara autonómica en el año 2012, aunque esta vez lo hizo con la coalición Alternativa Galega de Esquerdas (AGE) que conformó junto a Anova y que lideró el histórico nacionalista Xosé Manuel Beiras.
Precisamente para aquella campaña Díaz fichó como asesor al todavía desconocido Pablo Iglesias, que ya entonces era su amigo, y que ahora premia su lealtad con un Ministerio que le va como anillo al dedo.
Díaz dio su salto a la política nacional en 2015, cuando concurrió como candidata al Congreso por La Coruña en las elecciones generales de ese año con la coalición En Marea, que conformaron Esquerda Unida, Podemos y Anova cuando el acuerdo a nivel estatal con IU había sido imposible.
Tras conseguir escaño, pronto se convirtió en una de las piezas clave del grupo parlamentario, por su relación de máxima confianza con Iglesias y por ser una de las diputadas con más experiencia en algunos temas de importante calado, como Empleo e Industria --los periodistas parlamentarios la reconocieron como parlamentaria más activa en 2018--.
COMBATIVA PORTAVOZ DE EMPLEO EN EL CONGRESO
Así, Díaz ha sido una de las caras más visibles de la coalición de izquierdas en materia de pensiones, tanto en los debates parlamentarios en el Congreso como en las manifestaciones y movilizaciones fuera de él.
La futura ministra de Trabajo ha prestado siempre apoyo a las concentraciones convocadas por la Coordinadora Estatal por la Defensa del Sistema Público de Pensiones (COESPE), muy críticos con el Pacto de Toledo y la celebración de sus reuniones a puerta cerrada; unas exigencias que tanto Díaz como Unidas Podemos han secundado, al pedir "luz y taquígrafos" en estos debates.
De hecho, la que será nueva responsable de Trabajo protagonizó uno de los momentos más polémicos de la XII Legislatura, cuando muchos grupos políticos la señalaron como responsable de "dinamitar" el Pacto de Toledo al poco de convocarse elecciones, desmarcándose de muchas más de las recomendaciones previstas, lo que precipitó la ruptura de unas negociaciones muy avanzadas hacia un acuerdo.
Díaz se ha labrado su perfil durante estos años como una firme defensora de la rebaja en la edad de jubilación, la revalorización de las pensiones como mínimo conforme al IPC y la reversión de todo recorte en materia laboral y de pensiones aprobado por parte de los Gobiernos de Mariano Rajoy, pero también por parte de Rodríguez Zapatero.
DEFENSA DE LA INDUSTRIA E IMPUTACIÓN EN UNA PROTESTA DE ALCOA
La nueva ministra de Trabajo también ha protagonizado buena parte de los debates industriales durante los últimos años en la Cámara Baja, destacando aquellos relacionados con Alcoa. Precisamente, Díaz fue imputada por su participación en una protesta frente al Congreso junto a trabajadores, investigación que finalmente fue archivada tras denunciar Unidas Podemos a la jueza, que insistió en imputarla a ella y a otros compañeros diputados pese a su condición de aforada.
Díaz ha sido muy crítica con lo que considera una falta de política industrial de los últimos gobiernos, reclamando un papel más activo del sector público para evitar las deslocalizaciones, mejorar mecanismos de ayuda como la interrumpibilidad, fomentar este sector y fiscalizar los precios de la energía.
GAL-YOLANDA DÍAZ (Perfil)
Yolanda Díaz, una de las voces más combativas por los derechos laborales y en defensa de las pensiones, será la nueva ministra de Trabajo, cargo desde donde tendrá que promover el diálogo con los sindicatos y con una patronal que desconfía de la entrada de Unidas Podemos en el Gobierno.
Su designación, adelantada por fuentes del partido hace unos días y confirmada este jueves por Moncloa, cubre la cuota de la confluencia gallega En Marea con una persona de probada lealtad a Pablo Iglesias.
Nacida en Fene (A Coruña) en 1971 y defensora a ultranza de su tierra y de la denominada "agenda gallega", Díaz es abogada y activista feminista.
Ha vivido la militancia de izquierda casi desde que tiene uso de razón, ya que es hija de sindicalista y sobrina de político. Su padre y su tío son hermanos gemelos, uno de CCOO y otro del BNG.
Militó en el Partido Comunista y accedió a la coordinadora nacional de Esquerda Unida en Galicia en 2005 para crear posteriormente Alternativa Galega de Esquerda, el germen de En Marea.
Antes de recalar en Madrid fue teniente de alcalde en Ferrol, en una breve etapa de cogobierno con el PSOE.
Entró en el Congreso como diputada de En Marea una vez que se conformó la unión de IU y Podemos con las confluencias gallega y catalana, y desde entonces ha ejercido como una de las diputadas más reivindicativas en comisiones como la del Pacto de Toledo.
De hecho, durante los debates para renovar las recomendaciones sobre las pensiones se plantó ante un documento que, aunque revalorizaba las pensiones con el IPC, consideró insuficiente porque no establecía un indicador "claro" que subiera la pensión mínima cada año.
Su oposición férrea a unas recomendaciones contrarias a Podemos -que defiende la jubilación a los 65 años- le llevó a presentar una batería de votos particulares que frustró un acuerdo casi cerrado en el marco del adelanto electoral del 28 de abril.
No obstante, como ministra no tendrá competencias sobre la Seguridad Social, con lo que no dependerá de ella el diseño de una eventual reforma del sistema público de pensiones.
Sus discursos en la tribuna ante los gobiernos de Mariano Rajoy o Pedro Sánchez la consolidaron como una gran oradora, casi siempre sin papeles o con una pequeña anotación que servía de base bien para defender a capa y espada el aumento del salario mínimo, o bien para criticar unos Presupuestos Generales del Estado que consideraba malos para Galicia, por lo que llegó a votar en contra.
Sin pelos en la lengua, Yolanda Díaz ha apostado por derogar las reformas laborales para que los convenios sectoriales prevalezcan sobre los de empresa y para restablecer la ultraactividad y hacer que un convenio no decaiga cuando llegue a su fin.
"Es el momento de ponernos los manguitos y esforzarnos", ha reivindicado, al tiempo que también ha salido a las calles para manifestarse por los derechos de las mujeres y la igualdad laboral.
Casada y con una hija a la que intenta ver casi a diario -ya que la prisa por coger un avión y llegar a casa siempre está presente en ella- es mujer de protesta y ha ocupado la primera línea de manifestaciones junto con trabajadores de Alcoa o Navantia.
Esconde una cara técnica cuando debate sobre sectores como el de la industria electrointensiva, además de que participó activamente en la comisión de investigación del accidente ferroviario del Alvia en Santiago de Compostela.
Antes de entrar de lleno en la política nacional, Díaz creó un despacho de abogados especializado en temas laborales y tiene experiencia en asuntos de derecho urbanístico y ordenación territorial. EFE
El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha felicitado este jueves a la diputada gallega de Unidas Podemos Yolanda Díaz que será la ministra de Trabajo en el nuevo Gobierno de Pedro Sánchez, aunque ha opinado que su cartera se reducirá a ser "una Secretaría de Estado”.
En la rueda de prensa posterior a la reunión de su Gobierno, Núñez Feijóo ha instado a esperar a conocer las competencias con las que contará el departamento que dirigirá la ferrolana: "vamos a ver si eso se queda en un ministerio o en una secretaria de Estado", ha dicho.
El máximo mandatario autonómico de Galicia ha considerado que al "desdoblar el Gobierno" para dar cabida a dos partidos políticos habrá ministros que, en realidad, harán funciones de secretario de Estado, como a su parecer sería el caso de Díaz si no tiene responsabilidades en la Seguridad Social.
"El tratamiento de ministro se les ha de mantener, pero todos sabemos que realmente es un secretario de Estado con rango de ministro, que son cosas distintas", ha resumido.
Con todo y respecto al futuro cargo de Yolanda Díaz, el presidente de la Xunta ha dicho que prefiere "un mal ministro gallego y conocido que un mal ministro de otra comunidad autónoma y desconocido".
Así las cosas, Feijóo también se ha referido al hecho de que se conozcan en tiempos diferentes "los ministros nombrados por el vicepresidente Pablo Iglesias", y los designados por Pedro Sánchez.
"Si empezamos como hemos empezado, el Gobierno no podía empezar peor, porque dos gobiernos no suman un gobierno, suman cero gobiernos", ha remarcado. EFE