El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, volvió a insistir este viernes en que Ucrania necesita poder atacar objetivos militares situados dentro de la Federación Rusa para poder cambiar el curso de la guerra a su favor, horas antes de que el presidente de EEUU, Joe Biden, se reúna en Washington con el primer ministro británico, Keir Starmer, para abordar la cuestión.
“Cualquiera que vea en el mapa desde dónde lanza Rusia sus ataques, dónde entrena a sus tropas, mantiene a sus reservas y sitúa sus infraestructuras militares entiende claramente por qué Ucrania necesita capacidades de larga distancia”, dijo Zelenski durante un foro sobre seguridad celebrado en Kiev.
El jefe del Estado ucraniano recordó que transmitió con detalle este argumento al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken, y al ministro de Exteriores británico, David Lammy, durante su visita a Kiev de este miércoles.
“Después de nuestra conversación, pienso que no quedan preguntas sin responder sobre por qué Ucrania necesita suficientes capacidades de largo alcance”, agregó Zelenski.
El mandatario subrayó la importancia de que, además de obtener permiso para golpear con ellos dentro de Rusia, debe recibir suficiente armamento de esas características “para cambiar de verdad el curso de la guerra y obligar a Rusia a buscar la paz”.
Tras reunirse con Zelenski este miércoles, Blinken y Lammy dijeron que transmitirían la información recibida a Biden y Starmer, quienes deben hablar este viernes en Washington del asunto y tomar una decisión.
“Cuando pedimos estos sistemas oímos repetidamente ‘estamos trabajando en ello’”, afirmó Zelenski en el foro.
“El tiempo pasa, pero los misiles rusos y los drones iraníes continúan sembrando el terror en nuestros cielos y entre nuestra gente”, remachó.
El jefe del Estado ucraniano también pidió que se envíe con celeridad el armamento ya prometido para equipar con garantías a las tropas ucranianas que combaten en el frente, e insistió en que los países de la OTAN deben ayudar a Ucrania a proteger su territorio de los ataques aéreos rusos derribando los misiles y los drones que se acercan a la frontera de los países de la Alianza limítrofes con Ucrania.