Hablar de masa madre es lo más cool, pero en Panadería J.Castro Hermanos (que ha abierto nuevo despacho y obrador en la calle Garda, 7 de Narón, sumándose al ya existente en Algeciras 25-27 de Neda) llevan tratando con eso toda la vida, durante tres generaciones,  eso sí, bajo el nombre de formento, que es como siempre se conoció a esta forma de elaboración tradicional, lenta y bien hecha. 

El pan es artesano y no se puede sacar como en una panificadora 5.000 barras diarias. Para hacerse una idea, se necesita un mínimo de cuatro horas, con el amasado, el formento, la segunda fermentación, embolado y cocido. 

Son masas blandas, con mucha fermentación, de alta hidratación, con levadura natural y solo una ínfima proporción de prefabricada. Ahí está el secreto, que no es poco. 

Pero más allá del exquisito pan, la panadería cuenta con bollería industrial pero también tradicional, con su espacio para la bizcochada, la bica, las proias, la bolla de huevo, sin olvidar las empanadas clásicas y las más novedosas, por encarga. 

Por eso, de 9.00 a 15.00, que es el horario del establecimiento naronés, se pueden hacer los pedidos.

 Porque el tiempo, en una panadería como esta, es oro. Y de eso saben mucho Diego y Suso Castro, que están al frente de J. Castro Hermanos.