Antes de nada, decirles que la portada que acompaña a estas líneas está obsoleta, pues el libro con el que el cartegenero Raúl Quinto ha ganado tanto el Premio de la Crítica –fallado, por cierto, en Ferrol, el año pasado– como el Nacional de Narrativa que concede el Ministerio de Cultura, ya va por la quinta edición. Y este éxito –no tanto por los galardones, que también, sino por el reconocimiento del público lector– no nos puede alegrar más porque el libro de Quinto es realmente excepcional, una bocanada de aire fresco y talento en un panorama literario muy condicionado por lecturas de consumo rápido.
“Martinete del rey sombra” es el título de un texto que navega entre géneros, que rompe sus fronteras, para abordar un episodio poco conocido de una época clave en el desarrollo de la ciudad de Ferrol, la mitad del siglo XVIII. Aquí se recoge la redada que bajo el reinado de Fernando VI organizó el Marqués de la Ensenada con la intención de arrestar y, por qué no decirlo –esclavizar o expulsar– a toda la población gitana del Reino de España: la Gran Redada –ese es su nombre– que comenzó en la noche del 30 de julio de 1749 y que se prolongaría durante las semanas siguientes.
Ferrol, y también Cádiz y Cartagena –el famoso triángulo de la Marina y la construcción naval–, son tres de las localizaciones en las que Quinto narra y recrea aquellos años de infamia –la amnistía plena no se produciría hasta 1767– que, por lo que sea –aunque podemos intuirlo– tienen poco espacio en la historiografía contemporánea.
Pero no solo es lo que relata, sino cómo lo hace, lo que convierte a Quinto en un autor de referencia. Con una veta lírica tremendamente efectiva, directa, descarnada, el autor consigue penetrar en las luces y las sombras de ese conjunto de personajes –el Marqués, los reyes, Farinelli, Rávago, etc.– y sus relaciones e interacciones para componer un cuadro completo y complejo que desvenda una realidad vergonzante. Es, sin duda, el fenómeno literario del año.