El Concello de Ferrol informó ayer, en la víspera del inicio del nuevo curso escolar, de las medidas adoptadas para contribuir a un regreso seguro a las aulas. Desveló así una de las cuestiones que más preocupaban a los responsables de los centros educativos, como es el tema de la limpieza y desinfección de las instalaciones. Una tarea que el gobierno local reforzará mediante la “reorganización do servizo da empresa adxudicataria e activando a súa bolsa de horas”. Esto garantizará la realización de estos trabajos tanto por la mañana como por la tarde –hasta ahora solo se llevaban a cabo una vez el alumnado abandonaba el centro–.
A pesar de reiterar el total compromiso del gobierno local para poner todos los medios de los que dispone al servicio de la seguridad de la comunidad educativa, el concejal de Educación, Antonio Golpe, recordó que ante la situación “excepcional que estamos a vivir como consecuencia da Covid-19, as administracións locais necesitan medios excepcionais por parte da Xunta, administración competente en materia de Educación”.
Precisamente de las medidas que tome el mencionado departamento autonómico, que ha vuelto a manos del conselleiro Román Rodríguez y que ayer celebró el Consello Escolar de Galicia, está muy pendiente el Concello, que ha venido trabajando con las direcciones de los CEIPs de la ciudad para conocer sus inquietudes y demandas.
Comedores escolares
El intercambio de información entre ambas partes permitió al Concello, entre otras cosas, materializar un protocolo de comedores escolares en el que se tuvo en cuenta el diseñado por la Xunta pero que “adaptamos e melloramos co fin de dar a mellor cobertura aos escolares dentro das nosas posibilidades e tendo en conta que as competencias en materia de Educación corresponden ao goberno autonómico”, dijo. El documento recoge, entre otros aspectos, que los usuarios podrán prescindir de la máscara de uso obligatorio exclusivamente en el momento de la ingesta de alimentos. Una vez finalizado el tiempo previsto para desayunar o comer, volverán a ponerla de nuevo. Este uso será también obligatorio si algún usuario tiene que levantarse de su sitio asignado.
Por su parte, el personal encargado del servicio no podrá retirarse en ningún momento la mascarilla. Este será además el encargado de limpiar y desinfectar las instalaciones del comedor. El concejal de Educación recordó que pese a haberse incrementado el precio de este servicio, los precios para las familias se mantendrán con respecto al pasado curso, asumiendo el Concello el coste restante.
El gobierno local reforzará también, como ya anunció la pasada semana, el personal en los comedores de los colegios públicos de la ciudad con el fin de “garantir que polo menos dous responsables atendan o servizo de xantar e almorzo á marxe do número de comensais inscritos”. A partir de ahí, apuntó, se incrementará el personal en función del volumen de alumnos usuarios. Esta medida permitirá “atender calquera indisposición do alumnado”, dijo.
Aunque el servicio concluirá este curso a las 15.30 horas –ya que por lo menos hasta enero no habrá actividades extraescolares–, el Concello “abre a posibilidade de que os nenos e nenas permanezan no centro ata as 16.00 horas se así o necesitan as familias”. Estas fueron algunas de las cuestiones abordadas el pasado martes en la primera convocatoria del Consello Escolar Municipal del curso actual y que fue desarrollado de forma telemática. Representantes de los grupos municipales, de las asociaciones de vecinos y de la comunidad educativa integran un organismo que acordó reunirse por lo menos cada tres meses, aunque también se celebrarán encuentros de carácter extraordinario con motivo de la situación generada por la pandemia del coronavirus.
Por otra parte, el Concello de Ferrol, en este caso a través del área de Benestar Social, inició ayer el reparto de ayudas a la escolarización, de las que finalmente se beneficiarán 521 menores. Las becas de comedor llegará a 284 menores.