El Gobierno municipal tiene previsto iniciar la semana que viene una ronda de contactos con el resto de partidos de la corporación con la intención de plantear algunos de los principales asuntos que debe afrontar la ciudad en los próximos meses. La movilidad, el área metropolitana y el futuro de la fachada serán los temas que la Marea pondrá encima de la mesa en los próximos días.
Estos encuentros coincidirán con el inicio del plazo para presentar alegaciones técnicas al presupuesto, que se abrirá el lunes.
Ayer se publicó en el Boletín Oficial de la Provincia la aprobación inicial de las cuentas y por lo tanto se abre un período de 15 días hábiles para que cualquier ciudadano presente sus alegaciones a las cuentas, algo que las formaciones de la oposición ya aseguraron que harán ante su desacuerdo con la propuesta del Ejecutivo. El plazo concluirá el 31 de este mes y entonces la oficina presupuestaria municipal deberá emitir los informes correspondientes.
El alcalde, Xulio Ferreiro, aseguró ayer que la semana que viene empezarán los contactos formales con el resto de grupos, aunque explicó que habla con ellos “todos los días” al encontrarse en los pasillos del palacio de María Pita.
camino difícil
Estas reuniones que Ferreiro anunció que propondrá al resto de formaciones no se antojan un camino de flores para el Gobierno municipal.
Las críticas de la oposición hacia los escasos proyectos en movilidad han marcado los cerca de dos primeros años de mandato de la Marea y así se lo hacen saber repetidamente. La reordenación de las líneas de autobús urbano es una de las tareas que la Marea tiene pendiente, así como continuar con la peatonalización de la Ciudad Vieja.
Mientras, desde hace unos meses surgió el conflicto entre el Gobierno local y la Autoridad Portuaria en torno al futuro de la fachada marítima, con La Solana y el hotel Finisterre como primeros asuntos a resolver.
Todos los grupos de la corporación mostraron su interés de que estas parcelas y los muelles interiores pasen a titularidad pública, pero la necesidad de la Autoridad Portuaria de obtener financiación para amortizar el puerto Exterior supone un duro escollo que el Ayuntamiento deberá resolver en las negociaciones con el ente y con Puertos del Estado.
Finalmente está la creación del área metropolitana, que todavía se encuentra en una fase inicial pero desde el inicio provocó polémica entre la oposición debido a la forma de enfocar el asunto de la Marea, que excluyó de todo el proceso al resto de formaciones de la corporación.
El resto de grupos reclaman que primero se deben dirimir las cuestiones en el seno de María Pita para luego trasladarlas al resto de ayuntamientos que están integrados en el área metropolitana.