Diego Rodríguez Piñón es un enamorado de los pájaros. La afición le viene desde la infancia, cuando su padre, amante también de la ornitología, lo llevaba a la zona de la Xunqueira, en su Cedeira natal, para disfrutar de la naturaleza y de la observación de aves. De esta pasión nació la idea de llevar a cabo la creación de un recurso educativo y familiar que sirviese también para poner en valor la obra de algún artista local, otro de los principales objetivos del colectivo Rampla Hotel Herbeira del que forma parte.
Contactó así con el joven André Ramil (Cedeira, 1989), al que encargó las ilustraciones que ahora dan vida a las 24 fichas del juego de mesa “Paxaros” en el que los participantes han de emparejar a los machos con las hembras de especies tan conocidas como petirrojos, gorriones, mirlos, camachuelos o lavanderas, entre otros. No es esta, sin embargo, la única opción de juego para un recurso lúdico que llegan sin librillo de instrucciones. “Cada familia lo utiliza de una manera diferente, según nos van contando, y hay diferentes opciones, como el juego de memoria, el que tiene por objetivo conseguir hacer el mayor número de parejas... Lo dejamos abierto a la libertad de cada uno”, comenta Diego Rodríguez.
Cada ficha contiene, además de la ilustración del ejemplar, su nombre en cinco idiomas diferentes. Junto a la denominación científica en latín, aparece también en gallego, vasco, catalán, castellano e inglés. “Se trata de promover la diversidad lingüística”, añade. Este es uno de los objetivos de un proyecto que busca además promocionar el arte y la creatividad, difundir del conocimiento y respeto por el mundo natural, ejercitar la memoria, favorecer el juego cooperativo y potenciar la igualdad de género y la solidaridad.
El propósito del colectivo Rampla Hotel Herbeira con este proyecto, al igual que con todos los demás que llevan a cabo, no es sacar rédito económico. Los beneficios que pueden generarse a través de la venta del mismo una vez cubiertos los costes irán destinados a entidades sociales.
El Concello de Cedeira adquirió ya 500 ejemplares, parte de los cuales fueron regalados el Día de Reyes a familias de la localidad para distribuir el resto entre los colegios del municipio.
“También estamos ya en contacto con otros concellos y entidades no solo de Galicia, sino también del País Vasco y de Cataluña”, comenta el artífice de una idea que cuenta también con la colaboración de la delegación de Ferrol de la Sociedade Galega de Historia Natural, a través de su presidente Xoán Rodríguez Silvar, así como de la Urdaibai Bird Center del País Vasco.
A pesar de que fue él quien ideó y coordinó el proyecto, para Rodríguez Piñón, el gran protagonista de la iniciativa es Ramil. “Cada ficha es una obra de arte”, dice de las ilustraciones del joven artista cedeirés. “El trabajo que presentó ha sido espectacular”, añade. Graduado en Historia del Arte por la Universidad pública de Sevilla, André Ramil, que también estudió un año de Ilustración en la escuela Pablo Picasso de A Coruña, optó por la técnica de lápices de colores para realizar los minuciosos y precisos dibujos.
“La verdad es que yo no sabía nada de pájaros, pero fui aprendiendo por el camino”, comenta. Y es que como dice Diego Rodríguez, “a pesar de que no están rodeando continuamente en nuestra vida diaria, para mucha gente siguen siendo grandes desconocidos”. El juego puede ser adquirido en las librerías de Cedeira y también a través del facebook del colectivo Rampla.