El pasado junio, un grupo de vecinos de la Ribeira de Barallobre decidieron que había llegado el momento de sumar esfuerzos para poner en valor el lugar en el que residen. Surgía así un colectivo que, desde entonces, se concentra cada final de mes, como ocurrió ayer, con el fin de reivindicar la recuperación de un espacio público del que, entre otros aspectos, destacan su “excelencia paisaxística”.
Reclaman, entre otras cosas, que el Concello de Fene recupere el proyecto planteado hace ya años, durante el gobierno de Rivera Arnoso, de rehabilitación para la zona, incluidas las calles y playas de lugar. En el mismo se recogía ya la posibilidad de reformar y acondicionar el edificio Fondomar, cuya concesión expiró hace ya unos quince años, para destinarla a usos sociales, deportivos y culturales, redundando así en el beneficio tanto de los vecinos de la zona como de las parroquias próximas.
En este sentido, instan al Concello de Fene y al gobiero local para que coordine con las demás administraciones públicas la consecución de fondos, incluso de ámbito europeo, para poder llevar a cabo una iniciativa que permitiría poner en valor la mencionada “ribeira”.